Después de años de intentos fallidos de traer de nuevo a la pantalla grande la historia del escalofriante payaso Pennywise, cae en las manos del argentino Andy Muschietti el crear un filme que capture el terror y la desesperación que Stephen King describe en las páginas de la novela. Este realizador logra un balance entre el terror y el humor infantil de un grupo de niños que busca detener esta amenaza.

“It” cuenta la historia del “club de perdedores” compuesto por siete niños que buscan detener la amenaza que tiene cautivo al pequeño pueblo de Derry, Maine. Los pequeños ahora tienen que luchar con todo lo que les causa terror si es que quieren sobrevivir a los ataques de Pennywise.

Pennywise es encarnado por Bill Skarsgård que hace su versión de una forma genial sin desprestigiar a la presentada por Tim Curry en la adaptación de los ochentas. El actor sueco nos presenta un personaje asqueroso y totalmente incómodo siempre con un detalle que hace sentir al espectador que está presenciando a una figura encarnada de la maldad; la sutileza es clave en mayor parte de la cinta dándole a la audiencia una sensación de curiosidad conforme avanza la historia.

Muschietti nos presenta una historia fluida. Afortunadamente  el realizador se da tiempo y nos da una probada de cada uno de nuestros protagonistas sin dejar atrás a ningún personaje de los siete integrantes del club. El realizador captura la fraternidad del club sin caer en los pasos escandalosos de la novela, nos presenta a un grupo de personajes con diálogo verosímiles a su edad y cómo observan el mundo. El director construye su historia con los dos primeros actos, excelentes, y un tercero que dejará a toda la audiencia de la sala con un buen sabor de boca.

Técnicamente “It” es perfectamente fotografiada por Chung-hoon Chung. Todo conspira para ser una de las mejores adaptaciones a una novela de Stephen King que nos trata de hacer olvidar la última adaptación fallida del autor.

It está en las manos de un realizador consciente de que una historia de terror moderna no solo se construye de sustos irracionales sino de construcción de personajes y complicidad con el espectador. Muy recomendable para los recién llegados al mundo de King. Los veteranos encontrarán esta adaptación como un excelente homenaje más que una construcción de hechos.