Los Lakers de Los Ángeles, de la mano de LeBron James y Anthony Davis, fueron una auténtica aplanadora ante el Miami Heat y consiguieron el decimoséptimo título de la NBA, con lo que honran la memoria de Kobe Bryant y su hija Gianna en un trágico accidente de helicóptero sucedido en el mes de enero. 

Después de desperdiciar su primera oportunidad de cantar victoria, el conjunto dirigido por Frank Vogel no tuvo rival esta noche. Y es que los Lakers tuvieron prácticamente un picnic y muestra de ello fue que ganaron el encuentro 106-93 para conseguir el trofeo Larry O'Brien. 

LeBron James fue el jugador más destacado de partido al terminar el encuentro con un triple doble de 28 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias, mientras que Anthony Davis registró 19 puntos y 15 rebotes. 

De esta manera, los Lakers de Los Ángeles consiguen su decimoséptimo campeonato de la NBA, con lo que empatan a sus máximos rivales, los Boston Celtics, como el equipo más ganador en la historia de la liga. 

LeBron y los Lakers cumplen promesa a Kobe

El 26 de enero de este año, el mundo del baloncesto y el deporte en general, sufría uno duro golpe: la pérdida de Kobe Bryant, su hija Gigi y siete personas más que fallecieron en un trágico accidente de helicóptero. 

Como era de esperarse, el equipo de Los Ángeles fue el más afectado por la partida de la 'Black Mamba'. Uno de los que más se involucró fue LeBron James, quien aseguró en varias ocasiones ante los medios de comunicación que ganarían el título en honor a ellos. 

"Te prometo que continuaré con tu legado. Yo me encargo aquí", escribió James unos días después de la trágica muerte de Kobe Bryant. Ocho meses y medio después, en medio de una pandemia mundial, le cumplió. 

James fue elegido como el Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales. Es el cuarto título de la NBA para el de Akron, Ohio, con lo que sigue aumentando su legado como uno de los mejores basquetbolista de la historia.