Una fuerte lesión ha vuelto a ser protagonista en una jornada de la NFL. Ahora se trata de Kyle Allen, mariscal de campo (QB) del Washington Football Team, quien sufrió una terrorífica fractura que le deja fuera del juego ante los New York Giants, y muy probablemente, de toda la temporada. 

Fue en los minutos finales del primer cuarto cuando Allen, quien buscaba conectar un pase con algún compañero, fue derribado por Jabril Peppers, cuyo cuerpo, cayó encima de tobillo izquierdo del mariscal de campo. 

Allen permaneció varios minutos en el campo, donde fue atendido por el cuerpo médico del equipo, el cual le inmovilizó la pierna izquierda y lo sacó del terreno de juego en camilla. 

En lugar de Allen, quien sólo había completado cinco de siete pases para 67 yardas, ingresó el veterano Alex Smith, quien, curiosamente, regresó hace poco de una terrible lesión parecida a la que sufrió su compañero este partido. 

Otra terrible lesión en lo que va de la campaña en la NFL

Esta no es la primera vez en la temporada de la NFL que se produce una lesión de este tipo. Fue tan solo en la Semana 1 de la nueva campaña que se dio la brutal lesión de Drue Tranquill, jugador de los Chargers de Los Ángeles. 

Tranquill también fue víctima de un tackleo que provocó que el cuerpo de Bobby Hart, tackle de los Bengalíes, la cayera encima de su pierna izquierda.

Otro que también se lesionó de una forma similar es Dak Prescott, el mariscal de campo de los Dallas Cowboys. Fue el pasado 11 de octubre cuando el QB se disponía a conseguir un primero y diez; no obstante, fue tackleado por Rashad Jennings, que, con la inercia de la jugada y su peso, hizo palanca sobre el tobillo derecho de Dak.

Estos son apenas tres jugadores que han sufrido lesiones similares que les privará de jugar lo que resta de la temporada de la NFL