Lo cierto es que una gran parte de la población, sin importar partido por el que vota, tiene genética priista, genética que la lleva a buscar al "hombre fuerte", al caudillo, al que "sí va a poder". A eso, al paternalismo, a buscar, o más bien a esperar, al que "sí nos va a resolver los problemas", fue a lo que nos enseñó el PRI durante 70 años. Si bien la gente no decidía quién era ese, lo cierto es que el "partidazo" lo lograba: ponía a un tipo que una vez en el poder aparecía como el todo poderoso, "el Sr. Presidente". El partidazo le organizaba al "Sr. Presidente" giras y besamanos de todo tipo. Aún hoy en día vemos al "Sr. Presidente", sea quien sea, en reuniones y mítines de masas en sus "giras" y apariciones en diferentes eventos, recibiendo campesinos, viejitos, estudiantes y hasta empresarios. ¿Quién ha visto a Obama o a Merkel, digamos, de apapachado y apapachador de grupos de presión variopintos? Tal cosa no existe.

Hay, por supuesto, las convenciones de los partidos y las apariciones públicas de los candidatos en EU y en Alemania, pero los candidatos a la presidencia norteamericana y a primer ministro alemán no "pueblean", como se hace en México, como hace en especial el Peje.

Sí, el Peje es el más priista de los políticos mexicanos, el que sigue más estrechamente la política de la puebleada y de la aparición personal. De hecho, el Peje no solamente  fue el único que apareció de manera personalísima en toda la campaña electoral representando a su negocio familiar Morena, sino que, por si alguien ya lo olvidó, el Peje es el único político mexicano que tiene su propia y muy personal, personalísima, película: "El Sr. López", hecha por su cineasta de cabecera, el tal Mandoki.

El Peje pueblea desde hace años - y solamente de 2006 a 2012 según declaraciones de él mismo gastó 1250 millones de pesos en eso -, tiene su película como objeto y personaje único y con su propio nombre, apareció en todos los spots y posters de su partiducho personal y familiar ... todo eso en un país priista de hueso colorado. ¿No tiene eso consecuencias, más allá de la acción de los operadores políticos?

De hecho, si México tiene gen priista, los votantes de la ?izquierda" tienen gen dictatorial. O bien son los priistas resentidos que están buscando quién "ahora sí les cumpla" lo que el PRI no les ha cumplido a pesar de haberlo prometido: el paraíso terrenal aquí en la tierra, con "agua de calidad y en abundancia", trabajo, vivienda, salario "dignos", educación gratuita, medicina gratuita, etc., etc., ¡ah!, y todo eso NO como en EU, Alemania, Japón, trabajando duramente sino, justamente, sin trabajar, nada más por el solo hecho de existir y "ser" mexicano y votar. Justamente ese o era el chiste de ser priista: tenerlo todo por la vía fácil de los favores y los conectes y los cochupos y los vales y los programas sociales del partidazo. Los ?izquierdistas" o son los desencantados y resentidos del partidazo priista o del PAN que "tampoco les cumplió" con aquello de que ahora sí iban a ser felices, o son los izquierdistas leninistas, estalinistas, castristas, maoístas, etc. que siempre desearon y buscaron al "partido" y su "gran líder" que los iba a hacer felices aquí en esta vida.

Entre resentidos priistas en busca del "Sr. Presidente" e izquierdistas en busca del "gran líder" - los maoístas hablaban incluso del "gran timonel" - no nos puede extrañar que en un pueblo de huérfanos políticos y acostumbrado a la tutela, la relación personal y el cochupo - desde el esquinero banquetero hasta el que se da en el gabinete -, justamente entre los votantes de la izquierda, se dé un voto importante por el Peje. Si los "izquierdistas" de eso piden su limosna: de la personalidad "salvadora".

¿No es cierto que el Peje se la pasa hablando de la "salvación nacional", del "rescate de nuestras riquezas", de "recuperar lo que es nuestro" - es decir, del posible paraíso terrenal que nos toca por ser mexi-nacos, solamente por eso y ya -? Justamente la ?izquierda" es la combinación de resentidos con fanáticos del paraíso terrenal mexicano priista-comunistoide. Pues resulta entonces natural que en una corriente política que siempre se ha caracterizado por la búsqueda de "hombres fuertes", dictadorzoides y liderzuelos como Cárdenas y, justamente, el Peje, los burócratas grises del PRD no sean de lo más popular.

Entre la nostalgia mexicana por el "Sr. Presidente", el amor izmierdista por los caudillos y las dictaduras, resulta claro que el gen priista que busca al político "padre protector" es más fuerte justamente en los votantes del Peje y su partido negocio familiar: un 9% de los mexicanos que adora al Peje. De hecho, tal como son las cosas, no debería sorprender a nadie. Lo sorprendente más bien es que el PRD siga siendo la mayoría de la votación de ?izquierda", dado el gen priista-dictatorial del votante de ?izquierda".

El Peje, "el Sr. López", seguirá esperando su siguiente película, la del 2018. Para eso da la orfandad política y ciudadana, la falta de educación cívica y democrática, la falta de preparación tecnológica y la incultura del mexi-naco, que espera que alguien "le cumpla" y pueda vivir como hasta ahora, sin disciplina, sin educación, sin orden, pero ahora sí, feliz, "nomás con que le cumplan" y le devuelvan sus "riquezas" - empezando por "el oro de los aztecas" -.

Lo raro no es que el Peje tenga muchos votos en La Gran Nacotitlán, la ciudad del desorden, la torta banquetera, el cochupo y la corrupción organizada a través del puesto público y del programa "social". Lo notable es más bien que el PRD y los otros partidos tengan tantos votos. Si el PRI y la ?izquierda" siempre han "trabajado" no por crear ciudadanos sino por impulsar a un caudillo que va a ?solucionar los problemas? a ? componer las cosas", lo notable no es que el Peje tenga 9% de la votación, sino más bien que haya tenido tan pocos votos.

Alberto J. L. Carrillo Canán

@acarrillo_mx

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