Mucho hemos hablado sobre la polémica decisión de la empresa Starbucks, de decirle adiós a los popotes de plástico en todas sus tiendas a nivel mundial.

Dicha decisión fue completamente aplaudida por la mayoría de la gente pero sobre todo, por organizaciones ambientales que años atrás habían señalado a esta empresa  de perjudicar  notablemente el  medio ambiente con el uso de miles de millones de popotes y  envases, que al tener una ligera cobertura interna de plástico se hacía mucho más complicada la degradación. Es decir, los vasos utilizados en esta cadena de café, tardaban hasta 20 años en descomponerse.

Con esta decisión, Starbucks marca y genera un modelo para todas las empresas de responsabilidad social y cuidado del medio ambiente, lo cual, es fundamental porque no solo los popotes deterioran y afectan  por tardarse hasta 800 años en degradarse sino que materiales como el unicel, tardan entre 100 y 1000 años en desintegrarse, los tetra pak 5 años y los pañales para bebé entre 250 y 400 años.

Por lo que es claro, que no solo esta empresa afecta considerablemente al medio ambiente, sino que existen miles de negocios que afectan igualmente con la utilización de otros recursos, que probablemente estén menos estereotipados o etiquetados negativamente, pero afectan de la misma manera.

Pero en realidad, no solo tenemos que exigir el cambio a las pequeñas  o grandes empresa, debido a que el cambio también debe ser personal. Es decir, podríamos comenzar con pequeñas acciones como separar  la basura en orgánica e inorgánica para que de esta manera no se mezcle y no se contamine toda la basura y pueda servir como composta  los residuos orgánicos y como materia prima  los residuos inorgánicos. También podríamos dejar de comprar animales, y así dejar de fomentar el cautiverio de especies que su  naturaleza real es ser libre en su hábitat. O podríamos llevar un termo cuando vayamos a comprar bebidas. O simplemente dejar de fumar o por lo menos colocar las colillas en los basureros, debido a que los residuos de cigarros tardan entre 5 y 12 años  en descomponerse y el exceso de basura de este tipo, generan inundaciones al ser  arrastradas por el agua de lluvia a las coladeras y taparlas.

Según datos de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), cada habitante genera 1.2 kilogramos de basura al día, por lo que es evidente que no estamos teniendo una conciencia real de nuestras acciones día con día que perjudican al medio ambiente y por supuesto, el lugar donde vivimos y nuestra calidad de vida.

El pasado 3 de julio la empresa mexicana, Sociedad Cooperativa  de Trabajadores de Pascual, famosa por la marca Boing, anunció también que reduciría el uso de popotes transformando los envases de sus bebidas, mostrando su compromiso con el medio ambiente.    

El cambio debe ser a nivel personal, a nivel de gobierno y a nivel mundial.

Es difícil crear un cambio impactante en el medio ambiente si alguna de las partes no se compromete al 100% con el planeta.

Es tu mundo y es del de todos, luchemos juntos por impactar positivamente el planeta  con pequeñas acciones diarias.