Con mucha preocupación me entero que nuevamente vuelve nuestro canciller Ebrard a Estados Unidos para “tratar” de resolver una bronca que NO es nuestra, sino de los emigrantes y la intolerancia de Trump con la migración.

Desde hace 3 años he propuesto algo que ojalá ahora sí les sirva para no poner a México de rodillas con otra amenaza de aranceles por algo que ni nos corresponde.

Presidente querido, Andrés Manuel: ¿Por qué no cede unos metros de nuestra frontera en Chiapas a los estadounidenses para que ahí pongan unas oficinas, consulado o como le quieran llamar, y en este lugar les resuelvan sus broncas a los emigrantes? En otros países ,como Canadá, tienen estas oficinas.

Si en un cartón “rojo” en esas oficinas les dicen a los migrantes: “Adelante”, los recibimos, que estos con una sonrisa pasen por nuestro territorio en bestia, camión o caminando hacia ese país, y sabrán que ya fueron admitidos.

Si, en cambio les dan un tarjetón “verde” o del color que quieran, y que indique NO pueden pasar, pues estas personas ya podrán decidir si se regresan con cara de “what” o si siguen adelante por nuestro territorio con la cara que quieran y en la forma que quieran, pero ellos mismos que lo decidan, sin meterse con México.

Así evitamos que muchos emigrantes enojados en nuestro territorio hasta lancen sillas a nuestra Guardia Nacional, que no puede devolver la agresión, y que finalmente, las dos partes interesadas, resuelvan su bronca de la forma que quieran.

Así también, quizás ni tengamos que poner tantos elementos de guardia, ni México se tenga que someter a los caprichos de Trump, ni Ebrard pierda su tiempo y su dignidad haciendo un viaje a aquel país.

Con todo cariño y preocupación para mi Presidente.

Y agradecimiento a SDP Noticias por su publicación,

Silvia Wybo