Muy abierta está la herida,

lo ocurrido no es pa´menos,

pues la guardia ya es guarida,

de los malos no tan buenos.

Se avecina un buen trancazo,

de la parca vengativa,

anda tras de un tal Durazo,

y se muestra muy altiva.

Del panteón se anda escondiendo,

lo protegen diputados,

más la muerte se anda riendo,

pues lo sigue a todos lados.

Una tumba constrictora,

ya le tiene reservada,

en su tierra allá en Sonora,

le va a ir de la fregada.

Culiacán fue su fracaso,

por más que le pegue al cuento,

quién le manda don Durazo,

policiar sin un sustento.

Dijo que renunciaría,

ante la soberanía,

si con eso sanaría,

de la gente su agonía.

La inseguridad no para,

por más que él pida su tiempo,

ojalá que le sobrara,

pero muere en el intento.

La calaca se lo lleva,

disfrazada de morena,

y en la tumba él abreva,

tras fallar en la faena.

 

No escarmienta éste individuo,

la vergüenza desconoce,

y se ha vuelto un mal residuo,

destinado al acabóse.

Quienes mucho lo conocen,

dicen que es de llanto fácil,

ojalá lo encalabocen,

y su celda no sea grácil.

La muerte aplicó una encuesta,

él quedó en el mero fondo,

su mujer ganó la cresta,

y le quitó lo cachondo.

Muy machín y peleonero,

se las da de muy picudo,

en su casa es mandadero,

de su esposa y ya no pudo.

La muerte no está segura,

de querer cargar con éste,

al verlo le da la agrura,

por su pinta tan agreste.

Pero ya está decidido,

tiene los días contados,

aunque siga ahí en su nido,

por los torpes diputados.

De la fosa no se escapa,

denlo todos por seguro,

eso dice la calaca,

mientras gira la guazapa.

Va que vuela pa´l infierno,

pero el diablo se incomoda,

yo no quiero tal interno,

que se vaya pa´ y que se joda.

 

Tantas veces en Palacio,

lo volvieron muy esquivo,

a los pymes se hizo reacio,

y de sus penas pasivo.

El Consejo que preside,

no coordina a los pequeños,

pues el interés reside,

en los grandes de tamaños.

Son contados por millones,

los que se sienten jodidos,

por el SAT y sus cojones,

y por eso están ardidos.

Si el Consejo de don Carlos,

no les tira su buen lazo,

va a acabar por mal colmarlos,

y le darán un albazo.

La muerte está muy pendiente,

de lo que hoy está pasando,

le hace falta un presidente,

y algo grande está tramando.

Tanto afán recaudatorio,

del gobierno transformado,

ha llenado el purgatorio,

de un sector ya muy saqueado.

Una cámara de muertos,

quiere la parca formar,

son ya muchos los entuertos,

que la IP ha de tragar.

Don Carlos pa ´presidente,

del “Consejo Mortandad”,

de negocios penitentes,

que al panteón fueron a dar.

 

Don Armando Garza Sada,

ya es frecuente en el Palacio,

no le asusta para nada,

aunque suele ser reacio.

En la I.P. es de los careros,

sus negocios bien lo valen,

aunque algunos factureros,

a sus huestes los señalen.

La muerte le frunce el cejo

desde hace varios días

anda por Carrizalejo

mostrándole las encías.

El asunto no es menor,

ellos lo saben muy bien,

y no debe haber temor,

si saben usar la sien.

 

Si ella quiere puede ser,

candidata de Morena,

para al Bronco suceder,

aunque Yeidckol truena y truena.

Siempre y cuando el presidente,

juegue claro en sus afanes,

y otros no le claven diente,

en la forma de los clanes.

El sepulcro ya está listo,

no se ocupa votación,

juego gano luego existo,

qué tremenda tentación.

La calaca es tomatera,

su panteón está en San Pedro,

y anda ya de mitotera,

con su caja hecha de cedro.

Va´pa la gubernatura,

de eso no hay ninguna duda,

más será su sepultura,

si la otra se pone ruda.

Mientras tanto Clara Luz,

deshoja la margarita,

puede irse hasta el cabuz,

o a la punta si hay gran guita.

Todo está por definirse,

entre el panteón o el albor,

de morena una vestirse,

y la otra tricolor.

De una cosa estoy seguro,

de la muerte no se escapan,

hoy por hoy todo es un churo,

del cual ellas ya se empapan.

Un postdata a ésta calaca,

se me ocurre de repente,

la Tatiana hizo alharaca,

e informó a toda la gente.

Prefirió ir con los vecinos,

despreciando a sus paisanos,

a los unos hizo mimos,

y a los otros puros guanos.

 

Dos secretos muy de Estado,

fueron por él revelados,

ah qué señor tan mondado,

al dejar a unos pillados.

Juan José Verde se llama,

quien de Ovidio se encargó,

un gran riesgo ahora le brama,

por lo que ahí sucedió.

El GIAN era un gran secreto,

bien guardado pa´su bien,

ahora está en un gran aprieto,

debido a “ya saben quién”.

Los malosos no sabían,

la estrategia del gobierno,

los millones pagarían,

hasta al dueño del averno.

Más les salió regalada,

ni un centavo les costó,

ahora sí a la chingada,

ésta vaina se fregó.

Cual Caronte en su barquera,

“ella” está muy impaciente,

que arranque la mañanera,

pa ´ llevarse al presidente.

 

Ahora ya le tienen miedo,

más al veto que a otra cosa,

en Palacio manda el dedo,

que los zumba pa´la fosa.

Salen todos regañados,

y la parca los consuela,

a la tumba bien bañados,

aunque mucho a ellos les duela.

Quedan solo los paleros,

que al entierro llevan vela,

pa ´fuera se van los fieros,

que cuestionen a su abuela.

Buscando la transparencia,

funcionarios se hacen bolas,

no conocen la decencia,

se parecen al Borolas.

La muerte no tiene prisa,

se pasea muy oronda,

y se muere de la risa,

en Palacio haciendo ronda.

A la tumba se van todos,

no le hace que no me mires,

aunque algunos anden beodos,

incluyendo a Chuy Ramírez.

 

Éstas fueron las calacas,

de unos cuantos personajes,

para algunos hay petacas,

y para otros buenos fajes.

Viene frío este diciembre,

más helado pinta enero,

depende lo que uno siembre,

ese será su granero.

Tantas muertes siguen dando,

la contraria a éste gobierno,

y los vivos van gritando,

que se vaya p´al infierno.

Inseguridad al cielo,

aunque se laven las manos,

las finanzas en el suelo,

sus “esfuerzos” son muy vanos.

En su afán recaudatorio,

el gobierno pierde piso,

va volando al crematorio,

porque el SAT así lo quiso.

Con la parca y de la mano,

no sin buenas intenciones,

vamos con el macuspano,

muy de prisa y a empujones.

Si la izquierda es su delirio,

y por ese rumbo va,

que disfrute ese martirio,

abrazándose a Jehová.

Los elogios que ellos buscan,

solo sirven pa´una cosa,

y de pronto se chamuscan,

antes de sellar su losa.

Son valores entendidos,

entre ellos se conchaban,

es negocio de bandidos,

y en el PRIAN se cobijaban.

Vean sus antecedentes,

eran otros sus colores,

hoy se dicen “buenas gentes”,

pero son unos “primores”.

Yo me bajo aquí en la esquina,

ahí me avisan cuando lleguen,

no es que traiga mucha muina,

mas no quiero que me entierren.

placido.garza@gmail.com

PLÁCIDO GARZA. Nominado a los Premios 2019 “Maria Moors Cabot” de la Universidad de Columbia de NY; “SIP, Sociedad Interamericana de Prensa” y “Nacional de Periodismo”. Es miembro de los Consejos de Administración de varias corporaciones. Exporta información a empresas y gobiernos de varios países. Escribe diariamente su columna “IRREVERENTE” para prensa y TV en más de 40 medios nacionales y extranjeros. Maestro en el ITESM, la U-ERRE y universidades extranjeras, de distinguidos comunicadores. Como montañista, ha conquistado las cumbres más altas de América.