Tenía estos apuntes bien guardados, con un letrero al que le puse SÍ, atendiendo el consejo que me dio Alejandro Jodorowsky, hace como 10 años que lo encontré de pura casualidad en un café de la Colonia Roma, en la Ciudad de México.

Si siguen leyendo, más adelante verán la importancia de esos SÍ.

Les platico: Eran tiempos en los que a las celebridades no se les pedían selfies, ni fotos; si acaso un autógrafo, como el que atesoro de Elena Poniatowska, una vez que me la encontré sentadita en un aeropuerto, donde después de voltear a verme escribió: “Para Plácido, entre dos aviones que nos lleven al cielo”.

En cambio, ni autógrafo tuve chance de pedirle a Jodorowsky porque estaba rodeado de gente, cumpliendo un contrato que firmó consigo mismo de dar una sesión de psicomagia una vez a la semana, después de haber memorizado los 78 arcanos del Tarot de Marsella. Lleva más de 30 años cumpliendo esa promesa: Una vez a la semana se reúne en un café de la ciudad donde se encuentre, para ofrecer consejos y consultas sin costo a personas a quienes pregunta sobre su pasado, y les ayuda a solucionar situaciones sobre su presente. A esto, le llama psicomagia.

Busqué los apuntes que hice de aquel encuentro con él en la Colonia Roma. Fue fácil hallarlos, bastó con que buscara donde tengo lo guardado con los letreros del SÍ.

Aún tengo algunas cosas guardadas en el cajón de los NO, pero no estarán conmigo mucho tiempo…. Me estoy desprendiendo de ellas inmisericordemente.

Leí los apuntes que tomé a mano-rápida, casi en taquigrafía, mientras lo escuchaba dar sus consultas. Espero que su paciencia les permita leer hasta el final porque creo que hay algunas perlas de sabiduría que -al menos a mí- me están cambiando la vida. Va:

• Hay que querer lo imposible.

• Entrégate a la ilusión. Vívela.

• Algo nos está soñando.

• Todo lo que vas a ser, ya lo eres.

• Lo que buscas, ya está en ti.

• Tú y yo, solo hemos sido recuerdos. Nunca realidad.

• Las personas normales no desarrollan todas sus capacidades humanas, viven encerradas en el yo. Es como si vivieran en un solo cuarto de los muchos que tiene una enorme mansión. Esas personas hacen una sola cosa en la vida y se ponen una etiqueta. Yo me quité la mía y hago todo.

• Vayan a su casa y peguen un letrero que diga NO en todo lo que sea inútil y uno que diga SÍ en aquello que sea útil. Luego, tiren a la calle todo lo que tenga la etiqueta del NO, incluso a su pareja…. si la tienen.

• Por cierto, pareja es: yo vivo con quien me alegra la vida y mis amigos son algunos de quienes me alegran la vida.

• No cuento las cosas; la gente que tiene ovejas cree que si las cuenta, se mueren.

• Santa Sangre, la Montaña Sagrada, El Topo, fueron algunas de mis películas. Tenía 23 años sin hacer cine. ¿Por qué me tardé tanto?, porque el cine siempre ha sido una industria, es un arte genial pero se usa para ganar dinero.

• Todo está regulado por la taquilla. Se hacen películas donde no importa el ser humano, es un cine lleno de patadas, balazos, proezas técnicas, situaciones ridículas que denigran al ser humano.

• Entras tonto al cine, te diviertes un poco, una hora y media, dos horas, te relajas y sales igual de tonto… o más. No cambias. Bueno sí, para mal.

• La conciencia se va formando conforme tenemos experiencia. La labor del arte es hacer aprender a ver, a sentir, a vivir. El arte tiene que ser terapéutico.

• El cine actual pide tu admiración. Admiras la técnica. ¿Después qué?, ¿Qué aprendiste? ¿Qué cosas nuevas sentiste?

• En la película Un Perro Andaluz, de Luis Buñuel y Salvador Dalí, la primera escena es una navaja que corta un ojo. Nunca olvidaré esa imagen. ( Digresión de Plácido: ¿Se acuerdan de mi artículo de hace unos días donde comienzo platicándoles esa escena?)

• El cine te debe dar imágenes que nunca olvides. Debe cambiarnos a nosotros mismos, para que una vez que cambiemos, cambiemos al mundo.

• Hay 4 formas de libertad:

• Intelectual: Pensar lo que tú quieras.

• Emocional: Sentir lo que tú quieras.

• Sexual: Hacer lo que te da satisfacción.

• Material: Vivir tranquilo y en paz.

• Libertad es ser lo que tú eres y no lo que otros quieren que seas.

• ¿En qué momento sabes lo que tú eres? Respuesta: Me detengo, paro este circo mental, lo conduzco al silencio y me voy a ver quién es éste metido dentro de éste ataúd de carne en el que me muevo.

• Y también me pregunto quién eres tú con quien estoy hablando. Eso es lo importante, saber cómo te sientes en tu vida diaria.

 

CAJÓN DE SASTRE

Se me acabó el espacio y esto va contra mi libertad. Algo voy a tener qué hacer para remediar tal limitante y ¿saben qué? En eso estoy y me va a ayudar mi General, que es uno de División y Diplomado de Estado Mayor, sí, el mismo que calza botas inglesas con costuras amarillas.

placido.garza@gmail.com

PLÁCIDO GARZA. Nominado a los Premios 2019 “Maria Moors Cabot” de la Universidad de Columbia de NY; “SIP, Sociedad Interamericana de Prensa” y “Nacional de Periodismo”. Es miembro de los Consejos de Administración de varias corporaciones. Exporta información a empresas y gobiernos de varios países. Escribe diariamente su columna “IRREVERENTE” para prensa y TV en más de 40 medios nacionales y extranjeros. Maestro en el ITESM, la U-ERRE y universidades extranjeras, de distinguidos comunicadores. Como montañista, ha conquistado las cumbres más altas de América.