Se estrena la película Cantinflas que, según ha informado, buscará un Oscar para México. Ojalá lo consiga. No soy experto en cine y no sé si acudiré a Cinemex o Cinépolis a ver el filme de Sebastián del Amo. Desde hace tiempo me quedé sin motivación para disfrutar espectáculos de esa y de cualquiera otra clase. Pero supongo que se trata de una obra interesante sobre el personaje que se llama así porque, cuando empezó su carrera ?lo explicó Carlos Monsiváis, creo?, olvidó un guión y cayó en incoherencias. A la gente le divirtió el enredo del comediante y le gritó ?¡cuánto inflas!?. De ahí se pasó a ?C'ntinflas?.

Ahora, ?cantinflear?,  dice la Real Academia Española, significa dos cosas: La primera, ?hablar de forma disparatada e incongruente y sin decir nada?; la segunda, ?actuar de la misma manera?. Es curioso, pensé que el diccionario de mi Word estaba perfectamente en sintonía con la RAE. Veo que no es así, ya que marca como error la expresión ?cantinflear?. Lo que sea, mucha gente cantinflea. Sobre todo los políticos. Y, recientemente, sobre todo los políticos del PRD.

Marcelo Ebrard ha cantinfleado bastante tratando de huir de su responsabilidad en el caso de la Línea 12 del Metro. El problema es que, mientras más incongruencias y más disparates expresa, más se hunde. Si Ebrard no le para a su cháchara, obligará al jefe de gobierno, Miguel Ángel Macera, a hacer lo que por sensatez política ni siquiera se ha planteado: proceder contra su antecesor. Mancera es un hombre sensato, pero como cualquier persona también se enoja. Y cuando alguien se exalta, pierde la prudencia. Marcelo Ebrard debe entender que su futuro político, y aun su libertad y hasta su patrimonio, dependen de que Miguel Ángel Mancera siga conservando la calma.

Otro perredista que recientemente cantinfleó fue Miguel Barbosa, presidente del Senado. Se sintió ninguneado por Andrés Manuel López Obrador ?AMLO, sin duda, desairó a Barbosa?, y para desahogarse acusó al líder de Morena de haber ofendido a la Cámara de Senadores, la ?casa del pueblo?. Barbosa quedó en ridículo y Andrés Manuel, otra vez, probó que es más listo que todos los políticos del PRD.

En fin, que le vaya bien a Cantinflas en la taquilla y en la ceremonia de los Oscar.