Después de las precampañas, la porquería que se avientan los partidos políticos no deja de aparecer. Por un lado, el PRI sigue mostrando que puede tener más y más casos de desvíos de recursos, como en el más reciente caso de Rosario Robles. Por otra parte, el Frente también demuestra que los escándalos de Guillermo Padrés y Josefina Vázquez Mota no fueron suficientes. Hoy vuelve a aparecer Ricardo Anaya en el ojo del huracán con más escándalos.
En los últimos días hemos visto como Ricardo Anaya viene protagonizando una supuesta triangulación de recursos. Este golpe mediático puede suponer que pierda puntos en las preferencias electorales de este 2018. También hemos visto como el PAN se parte en su interior. El candidato del Frente y su grupo han sido exhibido por el gobernador de Chihuahua, Javier Corral. También personajes como el Senador del PAN de Jalisco, José María Martínez ha renunciado al partido, se presume que pueda unirse a Morena en aquella entidad. Todo esto supone una fractura que puede crecer en el partido blanquiazul en las próximas semanas.
Anaya y el Frente a este paso no soportarán pelear por el segundo lugar en las encuestas electorales para presidente de la República. López Obrador viene creciendo y reclutando más personas a su partido político. Hay que recordar que el ex panista Germán Martínez fue uno de los más recientes fichajes de Morena, además de Napoleón Gómez Urrutia. Lejos de restarle, Morena se ha mantenido al frente con estas dos figuras polémicas.
Por otra parte, al equipo de Meade se les ocurrió ampliar su plantilla. Me parece que el inminente fracaso, lo repartirán entre más personajes. Personas finísimas como Osorio Chong, René Juárez Cisneros, José Murat y Arturo escobar son algunos de los fichajes turbios del equipo de Meade. Pareciera más un escuadrón del miedo y no un equipo de campaña. La falta de capacidad y liderazgo de Ochoa Reza, lleva a traer a personajes “patito” al equipo de campaña del PRI. La derrota está más que asegurada, lo que buscan es enlodar ―como solo ellos lo saben hacer― la contienda para llevarse la segunda posición en las elecciones.
Mucho se esperaba que la guerra sucia fuese del PAN y PRI contra López Obrador y Morena. Pero estamos viendo que la pelea es entre ellos, cuando les sobra tiempo dedican espacio a atacar a Morena. No me imagino lo que se viene ahora que sean las campañas en forma. La contaminación que generan los partidos se puede salir de control.
Pues aquel presidente joven e inteligente del PAN, se viene cayendo. La traición, la tranza y ambición de Ricardo Anaya terminó por hundirlo. Toda esa inteligencia y capacidad fue limitada y temporal. Después de que ganaran elecciones en vario Estados en 2016, se fractura su relación con el PRI. Posteriormente se fractura el mismo PAN al interior, fractura los partidos que se le aliaron. Y para mala fortuna de Anaya, se sigue partiendo su partido.
El candidato blanquiazul viene culpando al PRI y al gobierno de usar a la PGR como instrumento de persecución en su contra. No lo dudo. Si bien, no tuviera negocios turbios, Anaya no estaría en esta situación, en este aspecto le tiene mucho que aprender a López Obrador. También se especula si los ataques vienen por parte de los Calderón, después de traicionarlos no sería extraño que así fuera.
Hoy el PAN y sus mascotas PRD-MC están pagando el precio de postular a un candidato opaco y con pésima reputación. Ricardo Anaya muestra falta de tacto, experiencia, soberbia y hambre de poder. Ya hay incluso rumores sobre un plan B para bajar a Ricardo Anaya. Según El Universal y su analista Salvador García Soto, la opción sería poner a otro más malo, Santiago Creel.
En fin, la hostilidad de las ya campañas políticas, inundan los medios de comunicación y redes sociales. La narrativa de México es polarización, corrupción, violencia, mentiras y más corrupción. El PAN y PRI lejos de hacer propuestas, muestran lo único que siempre le han dado a México, pura mierda. El resultado del éxito de López Obrador no es solo mérito propio, es resultado de lo que el PRIAN han generado.
A este paso la opción sigue siendo votar por el menos malo, por el que robe menos. Veremos cuánta porquería más se siguen aventando los partidos políticos. También veremos una vez que se terminen de hacer pedazos, cómo será la guerra de lleno contra López Obrador. Fracasaron con el tema de Venezuela y Rusia ―aunque lo siguen usando―, ya solo falta Corea del Norte, los musulmanes y los extraterrestres.
Twitter: @Hugo_Canelo