Cabe recordar que Miguel Ángel Mancera arrasó en las elecciones con un 63 por ciento de la votación dejando el cargo con un índice de aprobación de apenas del 31 por ciento; mucho menor que el alcanzado por Marcelo Ebrard con el 63 por ciento y por Andrés Manuel López Obrador con un 76 por ciento.

A pesar del fracaso y mal desempeño de Miguel Ángel Mancera, él es ahora senador de la república. En nada lo avergonzó su fracaso; lo importante es permanecer activo en la política para poder seguir haciendo grandes negocios y estar al tanto de las argucias políticas para tratar de mantenerse impune gracias a grandes complicidades.

Para Mancera, el exDistrito Federal se convirtió en un gran negocio, le cambió el nombre sin realizar una consulta ciudadana; gastando millones de pesos de nuestro dinero para el cambio de imagen: papelería, licencias, placas, letreros, publicidad… ¿cuál fue el beneficio? Ninguno. La Ciudad de México, la ”Ciudad Rosa” tan presumida por el irresponsable Mancera se tiñó violentamente de rojo y la dejó despreocupado con la tasa más alta de violencia en los últimos 20 años. El número global de delitos creció, los homicidios dolosos se incrementaron, los ataques con armas de fuego subieron más de cien por ciento. El narcomenudeo incrementó y Mancera siempre negó la existencia de cárteles en la ciudad. Eso sí, se dedicó meticuloso a maquillar las cifras delictivas.

El 13 de diciembre de 2013, Mancera incrementó la tarifa del metro, de tres a cinco pesos bajo la promesa de mejorar el servicio, pero esto no sucedió, de hecho empeoró: cuenta con trenes en pésimo estado que generan cortos circuitos, retrasos en los servicios, vagones repletos e inseguros, menos viajes y severas inundaciones jamás antes vistas, además del crecimiento de la mafia del comercio informal. El servicio del Metro decreció durante su mandato. A pesar de que se recaudaron miles de millones con el incremento, no se compraron los 45 trenes prometidos, porque “sólo alcanzó” para diez. Tampoco se incorporaron los 105 trenes a los que se comprometió. ¿Qué se hizo con el dinero?

Los capitalinos fuimos sometidos al pago forzoso de varias medidas: los parquímetros y las fotomultas. Grandes y turbios negocios…

Los dueños de los parquímetros “ganaron” el permiso para su instalación sin concurso ni oponentes. El negocio de los parquímetros arroja ganancias de 22.5 millones de dólares por año; de lo acumulado el 30 por ciento debía haberse utilizado para mejorar las colonias; no existe la certeza no se sabe qué fue del dinero. Lo único cierto es que no hubo mejoras… es evidente que ninguno de estos recursos se utilizaron para beneficio de las mismas. Calles llenas de hoyos y sin coladeras, las banquetas rotas, sin rampas para las personas con discapacidad en las que reinaba la inseguridad… en ese sexenio todo se cobró y todo empeoró, todo lo recaudado se manejó sin ninguna transparencia, muchos millones desaparecieron…

Durante los tres años que el gobierno de la Ciudad de México aplicó las fotomultas, de 2016 a 2018, recaudó un promedio de tres mil 600 millones de pesos, de los cuales 46 por ciento se entregó a las empresas que instalaron los equipos, mientras que el 54 por ciento restante alrededor de mil 944 millones de pesos, llegó a la Tesorería capitalina, pero no existe evidencia alguna de cómo se usaron esos recursos, por lo que existe opacidad en este dinero que se recaudó. Mancera declaró que esos ingresos serían canalizados para la reconstrucción de la capital por los daños causados por el sismo del 19 de septiembre, sin embargo no sucedió, nadie sabe qué se hizo con ese dinero ni con las donaciones realizadas por otros países…

Así es como el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera traicionó a todos los capitalinos, ¿en dónde está el dinero todo el dinero que se recaudó? En una conferencia Mancera aclaró que era mentira que el dinero haya ido a parar a una bolsa determinada o que haya sido para fines personales.

Mancera, también convirtió a la Ciudad de México en un “cártel inmobiliario”, permitiendo el desmedido incremento en la construcción de edificios tanto en Paseo de la Reforma como en diversas partes de la ciudad, beneficiando a inmobiliarias y “asociados” que permitieron el cambio de uso de suelo. Miles de millones de pesos están de por medio en estas construcciones, edificios de más de 25 pisos construidos en una ciudad altamente sísmica. Creó un grave caos inmobiliario y de movilidad…

Para rematar, se empecinó y echó a perder la histórica vía, la única avenida que quedaba del México del ayer, que fue trazada por Maximiliano; Mancera fue sordo a las opiniones de expertos y ciudadanos; demeritó la belleza de la Avenida Paseo de la Reforma. Bajo sus “argumentos de movilidad”, se oculta la red de intereses económicos. Explotó comercialmente Paseo de la Reforma así como la Calzada de Guadalupe y Calzada de los Misterios, colocando anuncios publicitarios a lo largo de estos trayectos que dejarán ganancias de alrededor de 11 millones de pesos anuales por un periodo de diez años.

El ganador por excelencia de las elecciones pasadas dejó una ciudad sumida en el caos, en la inseguridad y a media reconstrucción. Ahora sigue en el senado hundido en una polémica por complicidades en el presunto desvío de recursos…

La noche del 21 de octubre catean una casa en San Ángel que está vinculada a Luis Serna, exsecretario particular y amigo de la infancia de Miguel Ángel Mancera. El “Cártel Inmobiliario” está formado por un grupo de exfuncionarios públicos relacionados con la administración pasada que han sido señalados por hacer negocios a partir de obras y construcciones en la capital. Los integrantes de dicho cártel inmobiliario serían perseguidos por operaciones realizadas con recursos de dudosa procedencia. Además de que se les imputa enriquecimiento ilícito.

Los principales señalados serían amigos del legislador Mancera por presuntamente impulsar desarrollos inmobiliarios y otorgar contratos. Se trata de los hermanos Raúl y Alejandro Ruiz Herrera, quienes habrían trabajado en las notarías 215 y 233 respectivamente, como el notario 215 Uriel Oliva Sánchez.

El exsecretario Luis Ernesto Serna Chávez contó durante el gobierno de Mancera con un millonario patrimonio inmobiliario y con gastos por 23 millones de pesos en una tarjeta que pertenecía a una surtidora de la administración de la ciudad.

Como secretario de Miguel Ángel Mancera, el exfuncionario ganaba un sueldo de 5,636,000 pesos; sin embargo, MCCI reportó que habría gastado cinco veces más dinero que el ganado en toda la administración.

De acuerdo con una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción (MCCI), el ex funcionario público habría gastado esa millonaria cantidad como beneficiario de una tarjeta que pertenecería a Jack Landsmanas, dueño de Kosmos, quien fue uno de los contratistas más grandes de la Ciudad de México durante la administración de Miguel Ángel Mancera.

Esto fue descubierto en pesquisas federales que tuvieron lugar entre 2016 y 2018; sin embargo Serna Chávez aseguró que se trata de un préstamo que pidió al empresario, el cual presuntamente fue inscrito por un notario público. En cuanto a la empresa que dio el préstamo, se trata de un conglomerado que pertenece a la familia Landsmanas. Éste lleva por nombre Kosmos y durante el sexenio de Mancera recibió alrededor de 14 millones de pesos en contratos públicos. Serna Chávez aseguró que el préstamo “ya se pagó y tengo para demostrar cómo se pagó”.

Esta empresa fue señalada también por diversos medios mexicanos por irregularidades durante esa administración en sectores alimenticios de las cárceles o para el Sistema de Transporte Colectivo (STC) de la Ciudad de México.

Miguel Ángel Mancera declaró conocer el supuesto préstamo de Serna y dijo: “todo está en manos de las autoridades y desconozco más datos”. Al final de sus mandatos los políticos desconocen todo, afirman siempre que se condujeron con “transparencia”…

Por otro lado, MCCI dio a conocer también que María de los Ángeles Simón Aguirre, esposa del ex secretario, habría recibido la donación de un departamento, luego de que se reabrieran los sellos de una construcción cancelada por autoridades del gobierno de México. “No intervengas ahí”, aseguró un funcionario que le dijo Serna en una llamada telefónica al hacer referencia a los frenos del desarrollo Be Grand Park San Ángel, dos torres de 26 y 23 niveles. El inmueble de 140 metros cuadrados tenía un valor de 5.7 millones de pesos. La esposa de Serna en menos de un año y medio se volvió propietaria de cuatro inmuebles; por un valor total de 26 millones de pesos, todos adquiridos entre noviembre 2014 y abril de 2015.

Bien articulada esta red de complicidad y corrupción entre familiares y funcionarios, entre amigos y funcionarios todos protegidos entonces por la impunidad y aprovecharse al máximo por haber establecido cínicamente que la corrupción “no era delito grave”. Ahora ya lo es…

Empieza a desarticularse esa red, tan fuerte, tan intrincada de la corrupción… ¿será posible que alguien pueda deshacerla?

Miguel Ángel Mancera, el jefe de gobierno dejó su cargo dejando sin pena, a la “Ciudad Rosa” sumida en la corrupción, infestada de edificios y teñida de rojo…