Tras la reciente noticia de la muerte del dictador cubano Fidel Alejandro Castro Ruz a sus 90 años, se han suscitado muchas especulaciones acerca del rumbo que tomará el gobierno del país cubano y, más específicamente, sus políticas de comercio exterior.

El ex dictador cubano se encontraba retirado desde hace 10 años y actualmente se encuentra al mando del país su hermano, Raúl Modesto Castro Ruz, quien continúa las políticas socialistas delegadas por su hermano.

Cuba es muy conocida por sus políticas comerciales y sociales muy cerradas hacia otros países. Un ejemplo muy claro es la deteriorada relación que los Estados Unidos y Cuba han tenido desde la revolución cubana en 1959.

El embargo económico a Cuba por parte de Estados Unidos en 1962 fue sin duda un hecho histórico que marcó la relación de estos dos países durante poco más de medio siglo.

Durante todo este periodo, la dictadura cubana y el gobierno norteamericano habían mantenido firmes sus posiciones y ya cerca de que falleciera Fidel Castro se podían observar las raíces de lo que podía ser un primer acuerdo entre ambos partidos para comenzar relaciones diplomáticas; todo esto durante el mandato del presidente Barack Obama.

Actualmente el tablero de juego ha cambiado drásticamente con la victoria del futuro presidente Donald Trump. El próximo presidente norteamericano asegura que los acuerdos comerciales tendrán que ser revaluados por el país cubano para favorecer a su pueblo, a los ciudadanos cubanoamericanos y a los estadounidenses en conjunto o de lo contrario cesara los acuerdos de normalización iniciados por el presidente Barack Obama.

Pese a todo esto, el precio de los fondos accionarios de Estados Unidos enfocados a Cuba han aumentado sustancialmente a partir de esta semana. Esto se debe, no a los fundamentales, sino a los inversores que especulan un acercamiento próximo entre estos dos países.

Generando este tipo de confianza una especulación a un turismo más abierto y una economía más prospera entre el continente americano y la isla cubana.

México por su parte cuenta con el ACE 51(ACUERDO DE COMPLEMENTACIÓN ECONÓMICA Nº 51) que es el protocolo comercial que tiene con el país cubano. Esta noticia podría significar una reevaluación de los tratos con la economía mexicana para un comercio más amplio.

Por otra parte, las preocupaciones de nuestro país aún continúan latentes ante la tensión con el país norteamericano.

Pero el fallecimiento de Fidel Castro puede ser visto como una oportunidad para aprovechar aún más el comercio de nuestro país con Cuba. El primer movimiento abrirá la partida a un nuevo juego que será trascendente en la historia económica de varios países.