Por lo visto a Marcos González no lo quieren ni en su casa.

Y es que el político chapulín ha dado la nota en los últimos días, tras irse por la puerta trasera del PRI y llegar a pedir cobijo en Morena.

Por ello, ayer integrantes de la bancada de Morena en el Congreso de Nuevo León y del movimiento Soy Republicano, cuya cabeza es Rodolfo Peña, se manifestaron en contra de las posibles nominaciones a comisiones de Marcos González en el Congreso local.

Los inconformes eran aproximadamente unas 300 personas que se reunieron en las inmediaciones del recinto legislativo en Nuevo León para solicitar a Ramiro González, Coordinador de la bancada de Morena en el estado, tome en cuenta a la militancia para una consulta a las bases para el ingreso del priísta Marcos González al grupo parlamentario.

Y es que en verdad parece como moda. Sobre todo allá en el Congreso de Nuevo León eso de la chapulineada o chaqueteada (por aquello del cambio de chaqueta de un partido a otro) ya tiene tintes de escándalo.

Marcos González es uno de tantos que deberían tener una poca de vergüenza antes de andarse cambiando de partido a su conveniencia. ¿Dónde quedan, pues, los principios?

En fin. Qué bueno que se le quiera poner un freno y se proponga someter a la votación de los militantes de Morena, porque hay cosas que de plano no se valen. ¿No creen?