Arrancan las campañas políticas y se destapan las cloacas, la competencia por demostrar qué partido o candidato es peor, es sin límite de tiempo, la dedicación puesta en ello no conoce cambio de horario, lugar o circunstancia, lo mismo puede uno recibir mensajes de texto, anunció mediante llamadas al móvil, un pasquín impreso, un correo electrónico, una publicación en las principales redes sociales, etc. Lo importante es denostar al oponente, sin escatimar tiempo ni esfuerzo. ¡Dedicadamente!

Pero... ¿Qué nos pueden decir de las propuestas?...

 ¡Llamará su atención estimado lector, ese espacio en blanco! Es el espacio que corresponde a las propuestas.

 ¿A ustedes les interesa saber los problemas personales de cualquier candidato? A mí, no.

¿Acaso, Querétaro nació con el PRI? No.

¿O es el PAN el inventor de un nuevo modo de vida en Querétaro? Tampoco.

Querétaro es un estado de gente que se distingue por su educación cívica, por su participación ciudadana, por involucrarse en todo lo que afecte o beneficie a la comunidad. Querétaro es tarea de todos los que lo habitamos, y es lo que es gracias a su gente.

Los queretanos estamos deseosos de escuchar propuestas, que los candidatos nos digan cómo solucionarán los problemas que aquejan al Estado, cuáles son prioritarios y la viabilidad para solucionarlos, queremos saber cuál es su capacidad para gobernar y gobernarse.

No queremos castillos de hielo, queremos proyectos viables, reales, serios y las garantías de que los habrán de llevar a cabo y sobre todo pensados a futuro, 6 años no son el futuro, solo basta ver el Querétaro de hace 20 años con el de hoy, todo era suficiente, vialidades, espacios de recreación, estacionamientos, etc... Hoy, nada es suficiente, vivimos prácticamente unos encima de otros, claro, estoy hablado del grueso de la población, no de los privilegiados con periféricos hechos prácticamente para uso personal, o fraccionamientos exclusivos, hablo de las mayorías, que son las que sostienen la economía del Estado, a las que ni por equivocación tienen la opción de no pagar impuestos, se les descuentan vía nómina, a las que viven al día y eso si bien les va, a esas mayorías que no tienen acceso a los restaurantes dos o tres veces por semana, si acaso en un cumpleaños o aniversario, y para ello deben de tener un cochinito en engorda por varios años, a los que transportarse de un lugar a otro resulta toda una hazaña.

Por eso señores candidatos, a estudiar y analizar la plataforma electoral registrada por sus respectivos partidos políticos en el INE y el IEEQ demostrando congruencia entre el decir y el hacer, porque los electores estamos hartos de la guerra sucia que descalifica y denosta al adversario y estamos ávidos de escuchar propuestas que se conviertan en soluciones en el ejercicio gubernamental, que incidan en todas las actividades del quehacer cotidiano de quienes habitamos y somos el pilar de esta tierra que nos vio nacer o a la que hemos adoptado.

¡Habemus Campaña! ¿Habemus congruencia?

Laura Tamés V.

@LauraTames