El domingo pasado en México los ultraderechistas del FRENA realizaron una protesta, de verdad lamentablemente ridícula como expresión de fuerza política, pidiendo que renunciara el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ese mismo día, desde la madrugada, las cadenas más importantes de la televisión de Estados Unidos difundían las escenas de violencia civil, que obligó al gobierno de Donald Trump a mantener el toque de queda en 25 de las ciudades más importantes de aquel país.

No existe punto de comparación entre las frívolas protestas de los acartonados integrantes de FRENA, y el vandalismo salvaje de los norteamericanos que protestaban por la muerte del afroamericano George Floyd.

El diario estadounidense The New York Times indicó que el presidente fue llevado al búnker en la noche del viernes, mientras los manifestantes forcejeaban con los agentes del Servicio Secreto para retirar las barreras metálicas instaladas frente a la verja que rodea la Casa Blanca.

Según la cadena televisiva CNN, Trump estuvo en el búnker cerca de una hora antes de regresar al sector de la Casa Blanca que le sirve de residencia, mientras en el exterior los manifestantes tiraban piedras y mantenían escaramuzas con los agentes.

El presidente Trump criticó a la alcaldesa demócrata Muriel Bowser de Washington, en un tuit el domingo por la mañana, acusándola de no permitir que la policía de DC ayude a los agentes del Servicio Secreto.

"Mientras él se esconde detrás de su cerca con miedo/solo, yo estoy con las personas que ejercen pacíficamente su Primera Enmienda (el derecho a la libertad de expresión) justo después del asesinato de #GeorgeFloyd y cientos de años de racismo institucional", le respondió la alcaldesa.

Episodios de protesta tan fuertes y la visión de un presidente acorralado, enfrentado con la alcaldesa de la sede del poder Ejecutivo del país más poderoso de la tierra, por fortuna aún no suceden en México.

Pero el presidente López Obrador debe apelar a su sensibilidad social, y no solo fundamentar sus acciones políticas en un reconocido olfato que le hizo ganar los comicios de 2018, con un margen nunca visto en la historia de la democracia moderna del país.

Un relato estremecedor de Los Ángeles nos pone a pensar seriamente si en México llegan a desbordarse las inconformidades sociales, hasta dónde podría llegar la inconformidad ciudadana.

"Nos salvamos de milagro", cuenta Díaz, músico de rock colombiano y empresario. "Casi no dormí pendiente de las cámaras de seguridad y viendo cómo robaban y quemaban las tiendas de amigos”, continúa en su relato.

Díaz cree que los saqueos y los destrozos en varias partes de la principal urbe de California, desde la zona del Downtown hasta Beverly Hills y West Hollywood, fueron algo más que el producto de la ira por la muerte injusta de Floyd en Minneapolis a manos de un policía: "esto fue crimen organizado", indica.

Y en México, las organizaciones criminales siguen muy fuertes, continúan siendo el más sentido flagelo entre TODOS los segmentos de nuestra sociedad.

Los riesgos de jugar con fuego cuando la pandemia del Covid-19 tiene alterada la estabilidad emocional de nuestros ciudadanos, quedan manifiestos en las escenas descritas de cómo, en estos días, prácticamente arde Estados Unidos.

Mucho cuidado.

 

EN TIEMPO REAL

1.- En su afán de ser el próximo dirigente nacional del PAN, Javier Corral se agarra de cualquier nota para generar escándalo, recientemente declaró que Alfonso Isaac Gamboa Lozano, extitular de la Unidad de Política y Control Presupuestal durante el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, tenía mucha información de la 'Operación Zafiro', investigación sobre un presunto envío de recursos federales para favorecer al PRI en elecciones estatales.

Alfonso Isaac Gamboa Lozano

Como queriendo deslizar el sospechosismo de que su asesinato era para callarlo, pues tenía mucho que decir, asegura el mandatario de Chihuahua. Parece que, aunque quizás ya lo sabía, quería obviar el hecho de que la viuda de Gamboa Lozano, sería la asesina intelectual del crimen.

Este lunes se dio a conocer que Betsabé N, viuda de Gamboa Lozano fue detenida en Morelos acusada de ser la responsable del asesinato de su pareja, se afirma que la habría proporcionado las armas con las que fue acribillado junto a su madre y hermanos, se sospechó de ella, pues los sicarios dejaron vivas a las parejas y a los hijos de las víctimas.

2.- Al asistir a la conferencia de prensa encabezada por el presidente López Obrador, el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, dio a conocer que el estado operará, a la par del semáforo sanitario nacional, con un semáforo local que contempla cada giro económico, ya que a partir de esta semana comenzará la preparación para la reactivación del ramo turístico.

Carlos Joaquín González

El estado, que depende en gran medida del turismo, ha perdido más de 83 mil empleos en los últimos meses debido a la pandemia, dijo Carlos Joaquín González, pero lograron mantenerse 400 mil empleos.

Entonces, Cancún reactivará el turismo la próxima semana, pero el mandatario advirtió dijo que la decisión de reabrir la industria del turismo en el estado tiene que ver con una tendencia a la baja en el contagio y agregó que la reapertura será lenta y progresiva.

3.- Correos electrónicos, fotografías, llamadas: las nuevas pruebas de los fiscales estadounidenses que vinculan al secretario de Seguridad Pública Federal en el sexenio del ex presidente Felipe Calderón, Genaro García Luna con el narco.

Genaro García Luna enfrenta 4 acusaciones en Estados Unidos

A poco más de cinco meses de haber sido detenido, fiscales de Nueva York entregaron a los abogados de García Luna diversas pruebas que pesa en su contra, entre las cuales se incluyen correos electrónicos, fotografías, transacciones financieras y comunicaciones interceptadas.

Su detención derivó de las declaraciones que hizo en su contra el exmiembro del cártel de Sinaloa, Jesús Zambada en el juicio que enfrentó “El Chapo” Guzmán, aseverando que entregó personalmente por lo menos seis millones de dólares a García Luna en pagos clandestinos a nombre de su hermano mayor, Ismael “El Mayo” Zambada.

De seguro tiemblan los demás funcionarios involucrados en el caso.