Conozco a Rodrigo Alpízar a través de mi amigo Juan Carlos Rojas. Ambos destacados y leales miembros de la CANACINTRA.

 

No sé sí a ellos les ha llegado como a mí un comunicado del Ing. Abdel S. Naime, dirigente de CANACINTRA en Los Cabos, BCS en el que revela indignado la guerra sucia que han emprendido contra Rodrigo Alpizar. Una guerra que instrumentan quienes no lo ven como CONVENIENTE A SUS INTERESES en caso de lograr la presidencia nacional del organismo empresarial mencionado.

 

El Ing. Rodrigo Alpízar no es militante de ningún partido. Cuando menos no lo sé y no he registrado manifestación suya en ese sentido.

 

Ha manifestado tener amigos comunes con el aspirante presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.

 

Tengo información de entidades como Aguascalientes, Querétaro, Sonora, Michoacán en las que la campaña de Rodrigo Alpízar para ser el nuevo dirigente nacional de CANACINTRA es bien vista.

 

Pero como lo manifiesta el comunicado de Abdel S.Naime, que pediremos a Federico Arreola pueda reproducir en SDPnoticias, hay miedo e indignación entre los miembros del organismo empresarial por la campaña que se ha emprendido en contra del aspirante a dirigirlos.

 

No tengo elementos para afirmar que detrás de esa guerra sucia contra Rodrigo Alpízar están los ex dirigentes empresariales Mario Sánchez y Miguel Maron. Ahora el primero es candidato a diputado plurinominal por el PAN y el segundo es subsecretario de PyMES de la Secreatría de Economía a cargo de Bruno Ferrari.

 

Mario Sánchez es la pieza que han manejado Marón y Ferrari para que los organismos empresariales de México se conviertan en voceros del PAN y apoyos incondicionales de las políticas de Felipe Calderón.

 

Los brincos de Mario Sánchez de la CONCANACO al Consejo Coordinador Empresarial, traen toda la huella del apoyo que le brindan Bruno Ferrari y Miguel Marón.

 

Ambos, igual que el consejero en materia de organismos empresariales del PAN, el ex periodista Luis Enrique Mercado, actual diputado de ese partido y aspirante al senado por su natal Zacatecas, le venden a Calderón y a Josefina Vázquez Mota la idea de que los empresarios de México están bajo su control a través de los desprestigiados organismos como la CONCANACO y el CCE.

 

La conclusión de este apresurado análisis, pero con fundamentos firmes a la mano, es que ahora en México para ser dirigente de alguno de los organismos empresariales existentes, primero tienes que ser militante del PAN y después estar bien con Mario Sánchez y sus patrones Bruno Ferrari y Miguel Marón.

 

Ese es el pecado de Rodrigo Alpízar: no ser panista ni dejarse espantar por Mario Sánchez y sus cómplices.