El Día de muertos era originalmente una costumbre judía

España estuvo tan influenciada por los judíos que la habitaban durante la Edad Media, que hasta hubo rumores de que el Rey Fernando II de Aragón, el que fuera esposo de Isabel la Católica, era, por nacimiento, judío.

Más adelante, cuando el Ministro Tomás de Torquemada expulsa a los judíos de España junto con los árabes, el día límite para ese propósito, devastador para España como potencia mundial, el 3 de Agosto de 1492, fue el mismo día que zarpó Cristóbal Colón del puerto de Palos de la Península Ibérica para descubrir América, por lo que existen diversas evidencias históricas de que en sus 3 carabelas viajaban judíos españoles, al igual que lo hicieron con Hernán Cortés cuando también cruzó el Atlántico para acá, por lo que la misma influencia judía-española también fue parte del Descubrimiento y de la Conquista de México, incorporando así varias costumbres, incluyendo el Día de muertos, que era originalmente una costumbre judía.

Los judíos que se quedaron en España y que decidieron convertirse al catolicismo, les llamaron "marranos"

Los judíos que se quedaron en España y que decidieron convertirse al catolicismo de esa época por medio de los tratados de la famosa inquisición de Torquemada, fueron nombrados muy discriminatoriamente: “marranos”, uno de los adjetivos más penosos de la Historia, pero de igual manera, seguían influenciando en España de diversas maneras, incluyendo la costumbre de jugar cartas mientras rezaban sus rezos tradicionales en hebreo llamados berajot, por eso se les llamó barajas a las cartas de juego.

Muchos de los descendientes de los llamados marranos y otros españoles en general, cuando decidieron trasladarse a la Nueva España, tuvieron que bautizarse con nombres de animales, incluyendo a los Garza, que forman parte escalonada de los fundadores de Nuevo León y su capital Monterrey, en México. Leer el artículo: El coraje de la corona española, publicado aquí en SDPnoticias.

Asar el cabrito en NL, es una costumbre judía

Y muy interesantemente, en Nuevo León, mantuvieron la costumbre judía ancestral de asar el cabrito, misma que el pueblo judío adoptó cuando salió del sistema de esclavitud de Egipto guiado por Moisés, siendo ésta una costumbre totalmente judía que los Garza y demás fundadores del actual Nuevo León no quisieron, por alguna razón que vale la pena investigar, perder; e, igual resulta de interesante, ahora que se acercan tiempos proféticos, y no sólo por la pandemia actual, que uno de los candidatos para gobernar Nuevo León tenga el mismo nombre que uno de los más importantes profetas judíos de la Historia, el mismo que ungió al Rey más poderoso que ha existido: David, me refiero al profeta Samuel.

Nota histórica agregada: También los judíos durante la emigración de Egipto en épocas de Moisés tenían la costumbre de usar un cabrito para ejercer el perdón a los políticos que no actuaban bien, lo enviaban vivo al desierto a su suerte, y le llamaban al pobre: “chivo expiatorio”.