3 de mayo de 2024 | 04:09 a.m.
Sorprendente

VIDEO: Pasan haciendo CrossFit y los comensales los siguen pensando que huían de algo

Un grupo de CrossFit desató el caos por una confusión: los comensales pensaron que huían de algo y así reaccionaron.
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Un grupo de CrossFit desató un caos en calles de Brasil, luego de engañar a los comensales con su actividad.

En redes sociales circula el video del momento, cuando hombres y mujeres haciendo CrossFit pasan frente a un restaurante.

Dado el grupo de personas que trotaba hacia una misma dirección, los comensales pensaron que huían de algo y los siguieron.

Grupo de CrossFit desata el caos ¿estaban huyendo?

En Twitter se hace viral un video grabado en calles de Brasil, que sirve como ejemplo claro de lo que es el pánico colectivo.

El caos que se desató por el simple paso de un grupo de personas haciendo CrossFit, terminó en decenas de comensales corriendo detrás de ellos.

Pero no por contagio de las ganas de ejercitarse, sino por un miedo a quién sabe qué.

Al inicio del video pueden verse 5 personas que trotan hacia un mismo lugar.

Una mujer que comía en el restaurante, fue la primera en levantarse de su silla para seguirlos porque pensó lo peor.

A ella le siguieron decenas de personas más, que volteaban con miedo hacia atrás y corrían siguiendo a los del crossfit.

Pasaron unos segundos cuando la estampida desató un caos, donde hasta el mesero del restaurante corrió con los comensales.

Persiguiendo a todos ellos, otras personas haciendo CrossFit siguieron su camino sin entender qué pasaba.

Sillas y mesas salieron volando; hasta la caída de un hombre por una confusión.

El video de la estampida abrió un debate igual de caótico que en las imágenes, pues muchos opinan que es “divertido y una tontería”.

“Histeria colectiva descripción gráfica”; “La locura de vivir en sociedad”; “Un ejemplo de como afecta la desinformación”, escribieron.

Asimismo, se comentó que también pudo tratarse de una estrategia para no pagar la cuenta por el pretexto.

“Buena técnica para no pagar”; “Hasta al mesero le valieron las cuentas”, se lee en los mensajes.