Tremenda disputa se vivió el pasado fin de semana en un tren de Londres con rumbo a Peterborough, en donde un grupo de jóvenes en evidente estado de ebriedad arrojó bagels a la cabeza de los pasajeros.

Lo que parecía una inocente broma derivada de una noche de fiesta se convirtió en el mismísimo infierno cuando, harto de las burlas de quienes no paraban de colocarle panecillos en la cabeza, un hombre perdió la paciencia.

La víctima se abalanzó contra uno de los responsables mientras otra usuaria intentó golpear a una adolescente. "La única palabra que define esto es ‘surrealista’. Era completamente irreal", comentó la persona que publicó el video.

El escándalo fue tal que el maquinista detuvo el tren en Hertfordshire y avisó a la policía, pero antes de que llegara algunos se bajaron para enfrentarse a golpes. No obstante, ya con las autoridades allí, ninguno declaró nada y se fueron sin detener a nadie. 

Con información de Mashable.