Los lopezobradoristas han pretendido refutar mis predicciones respecto al resultado de la próxima elección con la última encuesta de Oráculus. Siguen sin entender que no entienden. En primer lugar, porque el porcentaje de intención de voto no refleja necesariamente el número de curules a obtener.

Por otro lado, resulta absurdo que crean que MORENA obtendrá el 40% de los votos sin AMLO en la boleta.

En 2018 MORENA obtuvo 35 puntos

AMLO ganó con 52% del total de los sufragios. ¿Creen que tres años después les irá mejor sin AMLO? Yo no.

Suponiendo sin conceder que MORENA tuviera mayor éxito que en las elecciones federales pasadas, si realmente el 40% de los votos se fueran para este partido y sus aliados, de acuerdo a los números de la encuesta que tanto cacarean seguirían sin obtener el 66% de los curules.

Es decir, acabarían teniendo menos curules de los que tienen al día de hoy con sus aliados y artimañas. Lo que supondría una derrota fáctica y la creación de una oposición real, que fungiría como bloque de contención a las ocurrencias presidenciales y a los embates del poder.

Oráculus

Porque de los números de esa misma encuesta de Oráculus se desprende que la coalición opositora PAN, PRD y PRI lograría al menos 167 curules, la tercera parte necesaria para que el oficialismo no tenga mayoría calificada, como actualmente ocupa.

Esos 167 curules opositores servirían para impedir reformas constitucionales. Y justamente ese freno constitucional fue el espíritu del origen de la alianza opositora.

El pacto por mantener la coalición opositora en el plano legislativo ha legitimado democráticamente su alianza.

Con su veto fáctico constitucional “Va Por México” sería un muro de contención contra los golpes del autoritarismo.