Frente a la aplanadora que es Claudia Sheinbaum y Morena en el proceso de la elección presidencial, muchos se preguntan si su oponente, Xóchitl Gálvez, fue la elección correcta o si ha sido el mejor perfil para competir esta elección; a mí me gusta responder con otra pregunta: ¿por qué consideran que el origen del Frente Amplio Opositor daría para ganar?

Los lideres del Frente Opositor pensaron que una “candidata ciudadana”, anclada en un proceso creado “por Asociaciones apartidistas” a través de un proceso de selección poco claro, con declinaciones forzadas y aún así, pensaron, que nadie se daría cuenta y que la mayoría de la población podría tragarse ese proceso “mágico apartidista”. Esconderían al PRI, al PRD, al PAN, a sus dirigencias, sus referentes nacionales y gobernadores, y mostrarían el perfil de una mujer “sin partido”. Pedirían el voto para alguien “apartidista y 100% ciudadano”, pensaron que no recordaríamos que Xóchitl ha sido candidata a gobernadora por Hidalgo, delegada en Miguel Hidalgo y senadora por el PAN.

El Frente Opositor esperaba que solo viéramos la narrativa de la dura historia de su infancia y que omitiéramos todo lo demás. El frente también pensó que su candidata podría ser un camaleón, es decir, adecuar su discurso a cada público, decirle a cada quien lo que quiere escuchar; y es esto, lo que ha orillado a Xóchitl a dar argumentos opuestos, sin un sentido epistemológico, ya que en algunos foros habla sobre políticas públicas que priorizan a los más pobres y en otros foros habla de priorizar a los empresarios.

En un mundo tan conectado, donde casi todo evento queda grabado, hablar a conveniencia del PRI, de sus bases y sus logros, se contrapone cuando habla de la ideología del PAN y las políticas públicas que impulsa desde su agenda conservadora, es una estrategia que desde su origen es un desastre, y eso considerando que no estamos incluyendo al PRD, lo cual haría esto, una mezcla imposible de unir y darle un sentido que motive el voto de la ciudadanía.

Lo más difícil de este proceso es que nadie pensó en los militantes de los 3 partidos que formaron el Frente Opositor, en las bases que son (o eran) la fortaleza de estos partidos, en particular las del PRI y el PAN, que eran conocidas por ser disciplinadas y constantes en su trabajo de territorio; a estas bases, considero que los vieron como una masa que seguiría sin chistar, las instrucciones de sus líderes, pero eso es una falta de respeto, ya que las militancias no son tontas, se dan cuenta que las están usando por muy poco a cambio; están cediendo espacios o dividiendo su poder con sus enemigos históricos, lo cual también causo una salida masiva a otros partidos como Morena y el Verde.

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Y como si unir tres ideologías distantes, con sus respectivas militancias enemigas históricas, no fueran suficientes ingredientes para la receta de la derrota, usan como sazonador, la idea del “voto útil”, es decir, decirle a la ciudadanía que vote por cualquiera que pudiera derrotar a Morena, en la voz de una supuesta “candidata ciudadana”; sin embargo, no existía en el ambiente político actual nadie que pudiera derrotar a la Dra. Claudia Sheinbaum.

Lo que ha demostrado esta aberración de ideologías, que es el Frente Opositor, es que son más tontos de lo que pensábamos.

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