Seguramente has escuchado hablar del crédito revolvente, pero hay quienes desconocen la manera en que funciona. Este no es más que un tipo de financiamiento que ofrecen los bancos y tiendas comerciales para dar facilidades de pago a ciertos plazos.

Existen diversos tipos de crédito, entre ellos los convencionales y los revolventes, con algunas marcadas diferencias. Los de tipo convencional se le otorgan a una persona por una única ocasión, mientras que el revolvente se renueva periódicamente de acuerdo al número de cuotas.

La forma más sencilla de explicar el significado del crédito revolvente es con las tarjetas que otorgan ciertos bancos y comercios. Las empresas bancarias o tiendas establecen un monto límite para gastar como el usuario lo prefiera.

Conforme la persona realiza pagos, la cantidad disponible para gastar disminuye, pero si se alcanza el límite no habrá forma de usar más esa tarjeta. La única manera de contar con saldo a favor es conforme se realicen los pagos del crédito solicitado.

Ejemplo:

Si un usuario cuenta con una tarjeta de 15 mil pesos y hace un gasto de 10 mil en determinado día, su crédito disponible será de 5 mil pesos para el resto del mes. Entonces, si necesita hacer una compra superior a los 5 mil no la podrá realizar.

Para poder hacer el gasto la persona deberá liquidar el pago de la tarjeta antes de la fecha límite de pago. Es decir, el tarjetahabiente deberá abonar 10 mil pesos para tener disponible los 15 mil iniciales, o bien, podrá pagar una determinada cantidad para hacer compras mayores a 5 mil pesos.

En algunas ocasiones las tiendas comerciales ofrecen facilidades de pago a plazos sin intereses. En esos casos el usuario deberá pagar una suma determinada cada mes hasta cubrir el 100% del costo total del producto o servicio.