Shocker aceptó que tiene un problema y entrará a una clínica de rehabilitación; Gustavo Adolfo Infante y Latin Lover apoyaron con sus gastos.

Tras ser detenido a inicios de abril en un hotel de Oaxaca, Shocker -de 52 años de edad- aceptó ingresar a un centro de rehabilitación ubicado en Culiacán.

La clínica donde estará Shocker pertenece a Julio César Chávez y otras personalidades han ayudado al luchador.

Shocker no quería, pero por fin iniciará su rehabilitación

Gisela, esposa de Shocker, reveló al programa De Primera Mano que el luchador viajó a Culiacán, Sinaloa, para iniciar con su tratamiento de rehabilitación.

Shocker se mostró tranquilo al entrar a la clínica que pertenece a Julio César Chávez, de 61 años de edad.

Shocker (Foto: Captura de video)

El luchador estuvo acompañado de su esposa, pero estaba dudoso de aceptar la ayuda que le ofrecieron para rehabilitarse.

“Primero decía que sí, después que no, al final aceptó. Dependimos de la ayuda de muchas personas, entre ellas quiero agradecerle al señor Julio César Chávez por habernos brindado ese gran apoyo”

Gisela

Además de la ayuda de Julio César Chávez para que ingresara a su clínica, Latin Lover -de 56 años de edad- pagó su traslado de Guadalajara a Culiacán.

“Le quiero agradecer mucho al luchador Latin Lover, que él fue el patrocinador de los pasajes, que ayudó a trasladarnos a la ciudad a Culiacán y llegar a la clínica”

Gisela

Gisela también agradeció a Gustavo Adolfo Infante -de 58 años de edad- quien pagó el costos de los estudios médicos que necesitaba Shocker.

“De primer mano a usted (Gustavo Adolfo Infante) que nos ha apoyado con los estudios que le van hacer”

Gisela
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Shocker estará varios meses en rehabilitación

El viernes 12 de abril, Shocker ingresó a la clínica de Julio César Chávez y su esposa tendrá terapia.

Shocker permanecerá en la clínica 6 meses o más, según decidan los especialistas.

Por otro lado, Shocker también podría recibir ayuda de médicos especialistas maxilofaciales, para valorar los problemas que tiene en la mandíbula.

Pero antes de que Shocker se someta a una cirugía para arreglar su mandíbula, debe estar recuperado de sus adicciones.

El luchador Shocker

La esposa de Shocker también tendrá terapia para manejar la situación del luchador.

Shocker se mostró tranquilo y aceptó que debía recibir ayuda especializada para enfrentar sus adicciones: “Dijo me quedo”.

Al inicio, Shocker no estaba convencido de internarse, pues anteriormente ha sido víctima de violencia en centros de este tipo.

Sería en octubre que Shocker finalice su tratamiento, si lo médicos no consideran que debe estar más tiempo.

Aunque Shocker negó que el día que lo detuviera en Oaxaca estuviera ebrio o drogado, aceptó que seguía consumiendo sustancias y deseaba dejar todo atrás.