México.- Chivas quiere recuperar el prestigio perdido y volver a pelear por cosas importantes a costa de lo que sea. Incluso si eso significa recoger las sobras dejadas por el América, máximo rival deportivo de los tapatíos.

Si al inicio del presente torneo una buena parte de la nación rojiblanca puso el grito en el cielo al ver consumado el fichaje del veterano Oribe Peralta, uno de los máximos referentes azulcremas de los últimos tiempos, la llegada de Ricardo Peláez, otrora directivo de las Águilas, abonó a la “americanización” del Rebaño Sagrado.

La cual se agudizaría todavía más si Peláez se decanta por reforzar al equipo con Hugo González, arquero que fue echado de Coapa para ir a Rayados y que ahora está en Necaxa. Por si fuera poco, el flamante director deportivo intentaría llevar al redil a Antonio Mohamed, técnico que salió campeón con América y que recién firmó un contrato de seis meses con Monterrey.

Como si no bastara, en el verano pasado arribó a la institución Nelly Simón a fin de hacerse cargo de la gerencia de Chivas Femenil; lo que no tendría nada de raro de no ser porque la excomentarista es una aficionada más del “Ame”. Sin mencionar que Jesús Molina, quien alzó un título con los "millonetas", también es parte del cuadro varonil. 

Era Vergara se caracterizó por cerrarle las puertas a los americanistas

Quizá para los fans de Chivas no importe tanto que viejos azulcremas lleguen al club para intentar salvarlo de la que es, sin duda, la peor crisis deportiva de su historia. No obstante, los más puristas no ven con buenos ojos ser una sucursal de los emplumados.

Cabe señalar que cuando Jorge Vergara se hizo del control del Guadalajara en 2002, una de sus primeras políticas fue negarse a toda negociación con el América. Y es que, recordemos, en la década de los 90 se dieron varios intercambios bastante polémicos, como el de Ramón Ramírez.

Sin embargo, al parecer la gestión de Amaury Vergara, hijo de Jorge, no tendrá empacho alguno en contratar examericanistas a fin de, seguramente, intentar replicar el éxito que ha sido rasgo insigne de éstos en las épocas más recientes.

Aunque eso sí, vale decir que Amaury pudo contratar a figuras relacionadas con el chiverío como Néstor de la Torre, que también fue sondeado para el puesto que Peláez ocupará formalmente a partir del Clausura 2020.

Además, según trascendidos también existieron conversaciones con Ramón Morales, símbolo del Rebaño, y con el propio Ramón Ramírez, quien era uno de los favoritos de los hinchas tapatíos.