Incontables son ya las ocasiones en las que López Obrador, cegado por su ambición de poder y electorera, exhibe su ignorancia en temas tan fundamentales como lo son económicos, desarrollo social, técnicos, jurídicos, financieros, etc.

Hasta hace unas semanas atrás, se masacraba con burlas e insultos a Omar Fayad, cuando éste presentaba la iniciativa conocida popularmente como la ?Ley Fayad?; el punto más duro de la crítica se centraba en que al parecer, al político lo mandaron al ruedo y sin capote a presentar una iniciativa que ni la conocía, ni mucho menos era de él; preguntas entre analistas políticos, columnistas y periodistas estribaban respecto de quien había redactado dicha iniciativa, con la obvia respuesta implícita que la misma salía de Los Pinos.

Traigo este tema a colación, porque precisamente, cuando Andrés Manuel López Obrador hace pública una postura, presenta un proyecto o una iniciativa, usualmente asume el papel protagónico de la idea; como si fuera un ?todologo?, un ser superdotado con un IQ mayor al de Albert Einstein, pareciera que solo necesita unos minutos López Obrador para saber todo lo relacionado con un tema.

 Pero, más me llama la atención, que cuando refiere a que un trabajo salió de sus asesores, nunca refiere quiénes son éstos, nunca da información de las credenciales que respalden a ?sus asesores?, y peor aún,  muy pocos, o casi nadie de ellos levanta la mano en decir, ?YO PARTICIPÉ EN DICHO ANÁLISIS?.

 Ejemplos como estos los puedo contar por decenas, tales como:

 1. Sus famosas encuestas, sin revelar quién la llevó a cabo, la metodología y dónde fue levantada.

2. Sus famosos informantes, que serían la envidia de cualquier agencia internacional de inteligencia tales como la CIA, KGB, GESTAPO, las SS; informantes que incluso hasta pueden tener acceso a conversaciones llevadas a cabo en un escusado casi-casi.

 La ambición de Andrés Manuel por estar presente cada día bajo los reflectores de su imaginario cerco informativo, lo hacen plantear verdaderos disparates en cuanto a temas electoreros, populares y ataques en contra del gobierno se le puedan presentar; y para muestra basta unos simples ejemplos:

 1. Habla de reducir impuestos, sin referir nunca una estrategia o plan de trabajo para elevar la recaudación de los impuestos básicos y que corresponden a todos los mexicanos cumplir; solo atina en referir que el rico debe de pagar más y el pobre no debe pagar, sin presentar ningún ejemplo actual, modelo o referencia de que tal estrategia es la adecuada.

2. Habla de que para generar empleos, el Gobierno Federal y los locales, deben impulsar la obra pública permanentemente, sin descanso y que el mismo gobierno debe de emplear a gente para llevar a cabo esas obras de infraestructura. Si bien es cierto una de las maneras de cómo impulsar la economía de cualquier país, es que sus gobiernos impulsen obra pública, esta se refiere en cuanto a la creación de nuevas empresas, micros, medianas; la grandes que participen en licitaciones contratarían más personal, etc.; la medida que impulsa AMLO de que sea el gobierno quien contrate a gente, implica que los empleos generados por este serían únicamente albañiles, carpinteros, mezcladores, peones, etc.; lo cual, para nada ayuda con el desempleo ya que, los trabajos serían temporales y generarían una carga impositiva al Gobierno para destinar recursos públicos a la nómina de estos ?empleados?.

3. Para disminuir la pobreza, solo refiere que la riqueza se debe repartir equitativamente, sin referir ningún plan, estrategia, o cómo es que la riqueza se va a repartir, no refiere de dónde va a salir esta riqueza y solo atina en asegurar que el Gobierno debe subsidiar todo a todos los pobres. En pocas palabras, para AMLO, los pobres no deben pagar impuestos, deben de ser contratados por el Gobierno, y deben tener todo subsidiado y así dejarán de ser pobres y el país se desarrollará.

4. Habla de acabar con la corrupción, cuando de sus huestes han salido personajes más corruptos que los señalados habitualmente y con actos vergonzosos y despreciables de corrupción. No propone cómo se debe trabajar para que los mismos ciudadanos, desde el que ofrece ?mordida? para no recibir una infracción de tránsito, hasta un empresario de primer nivel dejen de ser corruptos también; su propuesta exclusiva de meter a la cárcel a políticos y funcionarios corruptos sin ver que éste es un problema de 50-50 con la población, exhibe su ignorancia en este tema.

Por último, su capricho relativo a la construcción del nuevo aeropuerto. Yo no soy ningún experto en ese tema, pero me bastó revisar canales como Discovery en lo que pasan programas relativos a como se construyen los grandes aeropuertos en las principales ciudades más importantes del mundo, para ver que, las razones expuestas tanto por la SCT, como por verdaderos expertos, así como columnistas y analistas, realmente tienen razón.

 Para la construcción de un aeropuerto, como lo han referido los anteriormente mencionados, lo último que se toma en cuenta es el lugar geográfico para la localización del mismo; y el proyecto de López Obrador, como los cangrejos, va en reversa, de adelante hacia atrás. Para AMLO, el tema del aeropuerto es simplemente electorero, estar en el reflector; a él no le importa que sea un proyecto a más de 50 años ni cuestiones técnicas; para él, es un tema de aquí al 2018 que tiene que explotar a su favor.

@ejlodena