Un equipo de investigadores del JSK Lab en la Universidad de Tokio desarrollaron un dron en forma de “dragón” que está integrado por varios drones de menor tamaño, los cuales funcionan de manera coordinada para modificar su forma bajo circunstancias especiales.

De acuerdo a un reporte de IEEE, el equipo no sólo es capaz de cambiar en diferentes formas, sino que también tiene la habilidad de decidir de forma autónoma la posición que le permitirá moverse con más facilidad en el espacio en el que se encuentra.

Llamado ‘DRAGON’, el sistema fue diseñado a partir de las cometas tradicionales chinos de dragón, donde la cola se compone de una serie de cometas más pequeñas e interconectadas, lo que permite mayor fluidez en sus movimientos.

El sistema de navegación está alimentado por un kit de desarrollo Intel Euclid, además de una serie de baterías colocadas a lo largo del cuerpo que le permiten volar hasta por un periodo de tres minutos.

Aunque la versión que muestra el video incluye únicamente cuatro módulos, con un par de hélices cada uno, sus creadores esperan poder convertirlo en un brazo volador de hasta 12 módulos que puede manipular objetos.