Joven con mente de tiburón vende sus selfies como NFT por más de 2mdp; ya le compraron cientos de ellas.

Sultan Gustaf Al Ghozali, un universitario que vive en Indonesia, se volvió millonario -casi- de la noche a la mañana gracias a una colección NFT.

Ahora, el joven no sabe cómo explicarle a sus papás que es millonario por “vender su cara” como NFT.

Sultan Gustaf Al Ghozali es millonario por vender sus selfies como NFT

Sultan Gustaf Al Ghozali es el ejemplo de una mente de tiburón. Se hizo millonario vendiendo sus selfies como NFT.

El joven, de 22 años de edad, es un estudiante universitario de informática que tuvo la mejor de las suertes en el comercio de NFT.

En entrevista con medios internacionales, él asegura que nunca imaginó el alcance de sus ganancias a través de NFT.

Vende sus selfies como NFT

En 2017, el joven se tomó su primera selfie sentado frente a la computadora.

Luego, cada día durante cinco años, Sultan Gustaf Al Ghozali repitió la misma fotografía para crear una colección de su cara.

Al principio, la intención del joven era crear un video de él mismo para su graduación.

Cuando descubrió el comercio NFT OpenSea, todo cambió para él y su bolsillo.

Sultan Gustaf Al Ghozali se enteró de la existencia del “blockchain” y decidió vender sus selfies como NFT.

Aunque pensó que todo se quedaría en un juego, pronto comenzó a recibir ofertas extravagantes de los compradores.

Vende sus selfies como NFT

El precio inicial de las selfies como NFT, fue de apenas 60 pesos. Ahora, el costo de cada una llega hasta los 200 mil.

“No sé cómo contárselo a mis padres (...) decirles que soy millonario por vender mi cara”, dijo el joven a AFP.

Con el paso de los días, el joven aumentó su colección de selfies como NFT, a la cual llamó ‘Ghozali Everyday’.

Ya para el mes de enero de 2022, Sultan Gustaf Al Ghozali tenía una fortuna millonaria en NFT.

Las ventas se dispararon de un día para otro”, contó.

Hasta el 14 de enero, la colección NFT del joven alcanzó un volumen comercial de 317 ether, equivalente a más de 2 millones de pesos.

“Creí que sería divertido si alguno de los coleccionistas adquiría mi rostro. Nunca pensé que alguien querría comprar las selfies, por eso les puse un precio de solo tres dólares”

Sultan Gustaf Al Ghozali.

Con información de RT