Solo un poquito más. No se le pide mucho al presidente ni a su gabinete. Solo un gesto amable, solidario, que muestre tristeza y compasión. Esa es la palabra: compasión.
Pero ayer ninguno de estos sentimientos brotó del presidente, ni de Rocío Nahle ante la manifestación de trabajadores de Dos Bocas.
Ante el cuestionamiento acerca del tema, el presidente se limitó a decir: “Son grupos de intereses creados, son golpeadores, son infiltrados”, pero sean quienes fueran, eran personas que estaban heridas; las imágenes no mintieron.
Nunca un atisbo de dolor, preocupación o solidaridad. Nunca eso.
Y por otro lado, del mismo modo se le cuestionó acerca del tema a Nahle, quien lejos de mandar algún mensaje de solidaridad o compasión por los heridos, se apresuró a decir: “Solo es un grupito de diez, ahí revoltosos, que no nos van echar por tierra nuestro proyecto”.
Y así, dos personas en el poder, sin poder hablar de amor por el prójimo, ese del que tanto habla el presidente. Sin transmitir amor o algún sentimiento parecido. Ahí, dos personas que hablaban de las personas como si fueran cosas, números, y nada más.
Un poquito de sensibilidad, señor presidente. Mínimo fínjalo. Un Poquito, nada más.
Claudia Santillana Rivera en Twitter: @panaclo