Siempre hay tiempo para destacar el potencial natural que tiene el país a nivel nacional. Todas las entidades de la República, de hecho, tienen sus peculiaridades y su riqueza cultural, lo mismo que usos y costumbres que, por décadas, se han arraigado, incluso se ha reconocido esa capacidad a otras latitudes mundiales donde admiran el valor que producen nuestras tierras en distintos aspectos. Eso, desde la llegada del expresidente López Obrador, se fue nutriendo y, de paso, se fue apoyando al contribuir con recursos importantes para su proyección. Por eso es tan común que el nombre de nuestro territorio nacional aparezca a ese nivel mundial, pues la ciudadanía de otros países, ante los espacios que dan apertura a marcos como el Tianguis Turístico Mexicano, tengan la oportunidad, en este relanzamiento que han hecho muchas administraciones estatales para presumir su potencial, sea una muestra de los que nos identifica.
El elemento clave de todo ello, desde luego, constituye los espacios para que la ciudadanía conozca esa promoción turística, cultural y gastronómica de distintos puntos del país. Baja California, que es el marco perfecto para hacer gala de este evento, dio el banderazo de salida con un objetivo claro: detonar el desarrollo económico y, de paso, generar una mejor perspectiva del compás tan amplio de componentes que nutren esa riqueza de norte a sur. Hace unos días, en efecto, resaltamos ese trabajo sustancial que está realizando la presidenta constitucional, Claudia Sheinbaum.
El fin de semana pasado, por ejemplo, se conformó el arranque para la edificación del tren México-Querétaro. Recordemos que la vía ferroviaria, entre muchos beneficios que ha traído, significó uno de los logros más importantes de la gestión de Andrés Manuel López Obrador, especialmente el sur, en el que coincidimos que estados como Campeche; Tabasco, Quintana Roo, Yucatán y Chiapas, salieron beneficiados. Esta última entidad, por cierto, calificada como la segunda entidad más segura, de acuerdo con datos que publicó hace poco el INEGI. Eso, desde luego, se ha visto reflejado en la afluencia de visitantes que tienen la garantía de viajar por las condiciones de seguridad que han brindado las autoridades que encabeza Ramírez Aguilar.
A propósito de Chiapas, que va caminando por la dirección correcta respecto a la estrategia de seguridad, fue uno de los principales protagonistas del Tianguis Turístico de México en Baja California. El mismo gobernador, en presencia de una multitud, pudo presumir, a grandes rasgos, la riqueza cultural y turística que significa la Selva Lacandona, las Cascadas de Agua Azul, Misol-Há, El Chiflón, los ríos Usumacinta y Grijalva, la Reserva de la Biosfera Montes Azules, la Ruta de los Volcanes, con el Tacaná y el Chichonal; así como las zonas arqueológicas de Palenque, Bonampak, Yaxchilán y Tenam Puente. En lo personal, seguramente millones de mexicanos comparten la misma concepción; me da mucho gusto el progreso que ha tenido el sur del país que, en décadas pasadas, vivió en el abandono y la discriminación de los gobiernos neoliberales que, una y otra vez, menospreciaron su potencial y la propia identidad que los caracteriza.
Eso nos hace reflexionar sobre el inmenso paraíso natural que tenemos de norte a sur. Pocos países pueden presumir ese sentimiento que nos produce esa emoción de ver tanta belleza cultural. Y cuando hablamos de un cúmulo importante que cada rincón del país ofrece en sus usos y costumbres, se nos viene a la mente y que, como mexicanos, debemos alardear ante los ojos del mundo. En México, pese a las diferencias ideológicas, compartimos una misma identidad producto del legado de nuestras costumbres que predominan. Por eso el Tianguis Turístico, como tal, lo podemos denominar como un elemento unificador de estas tradiciones que nos enorgullecen, pero también como un marco de acceso para detonar la economía que México elabora con sus propias manos. Eso se tuvo muy presente, especialmente, en un proceso de transformación como el que vive el territorio. De hecho, se incluyeron rasgos importantes de la cultura de Puebla, Guerrero, Baja California y Querétaro.
Me hubiese gustado, seguramente por temas de agenda, que Michoacán hubiese estado presente para presumir su riqueza cultural y su robusta naturaleza. Eso se ha reflejado, incluso, con reconocimientos a nivel mundial, como la propia Revista Internacional Forbes, que reconoció el buen trabajo del presidente municipal de Pátzcuaro, Julio Arreola, al nombrar al municipio uno de los siete lugares más acogedores del país. Todo ello, para beneficio de la población civil, ayuda a mejorar la calidad de vida. Ese es, en definitiva, uno de los objetivos del Tianguis Turístico que se está celebrando en Baja California. Y vaya que sí, pues la celebración, con ese nivel de participación, lució inmejorable a comparación de otros años. Eso, por un lado, subraya la importancia de los productos mexicanos que, lo hemos dicho, compiten en ese nivel de exportación, debido a la calidad que le imprimen la mano de obra de nuestros paisanos.
Por eso el Tianguis Turístico, que también debemos verlo como una ventana de promoción a toda la infraestructura que tenemos en lugares turísticos, especialmente en playas y zonas arqueológicas, tiene una mayor relevancia ahora que se ahonda más en el tema. Desde esta tribuna de opinión, desde luego, siempre presumimos todos esos eventos que llevan a México a otras latitudes. Eso, en Baja California, se está mostrando en su mayor apogeo con miles de turistas que se han dado cita en la frontera con EU.