Sonora Power

Juntos los ciudadanos tenemos el poder y aunque nuestra democracia participativa está aún en etapa de formación, nuestra cultura cívica y política poco a poco comienza a cambiar.

El antecedente directo fue la consulta de revocación de mandato, en la que participamos poco más de 17 millones de ciudadanos, ateniéndonos a la máxima de que “El Pueblo pone y el pueblo quita”.

He tenido el raro honor de encabezar una causa ciudadana legitima, a fin de cuestionar el papel de la Senadora por Sonora, María Lilly del Carmen Téllez García, actual integrante de la bancada del Partido Acción Nacional en la llamada cámara alta, que integra con la Cámara de Diputados el Congreso de la Unión.

La senadora mejor conocida como Lilly Téllez, después de ser electa como representante de la Alianza “Juntos Haremos Historia”, que la postuló como candidata y cabeza de fórmula al Senado por mi estado, llevando al hoy gobernador Alfonso Durazo Montaño como compañero y claro, siendo conducidos por Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial, traicionó a todos y se refugió justo con el peor enemigo de la “Cuarta Transformación”.

Los argumentos de la senadora Téllez, siempre muy dudosos, son que está arrepentida de haber aceptado la postulación, que el hoy presidente Andrés Manuel López Obrador conduce según ella al país al desastre, y se ha convertido en una suerte de ariete de la oposición de ultraderecha, comportándose de una manera dudosa, insultando al jefe del ejecutivo, promoviendo la desinformación, y haciendo eco de las causas más dudosas de la ultraderecha y últimamente incluso lanzando amenazas y discursos de odio hacia periodistas, como es el caso del también paisano Vicente Serrano.

Esas son las razones por las que decidí hace un poco más de un año, emprender una iniciativa y petición ciudadana en la plataforma favorita del panismo para hacer demostraciones públicas sobre cualquier tema o causa política a que a usted se le pueda ocurrir, es decir la plataforma de internet www.change.org

Lo hicimos ahí y de manera orgánica, solo ateniéndonos al rechazo ciudadano contra la senadora y alcanzamos durante el fin de semana pasado el objetivo primario, que era reunir 150 mil firmas en rechazo al desempeño de Téllez y solicitando que se le haga un juicio de desafuero.

Hoy lunes que redacto esta colaboración para SDP Noticias me encuentro con que la petición ciudadana (que se ubica en www.change.org/fueralillytellez) ha sumado 175 mil 801 firmas y que incluso más allá de ser una de las causas con mayor respaldo, sigue en crecimiento.

Reunir firmas para una causa y acción política como es el desconocimiento de una integrante de la alta clase política en México, me ha traído todo tipo de reacciones, comenzando por las de la misma señalada, que en su momento reaccionó de manera airada, molesta, incluso acusándome de haberle pedido dinero a cambio de no solicitar su desafuero, por lo que según Lilly Téllez yo habría tratado de extorsionarla periodísticamente, lo cual está realmente muy lejos de la verdad.

Claro también he recibido amenazas, insultos, señalamientos de toda índole de bots, trolls y todo tipo de esperpentos digitales que pululan en las redes, en especial en Twitter.

Sin embargo lo más importante es el respaldo y el entusiasmo ciudadano, miles y miles de firmantes lo hacen de manera legítima y entusiasta, considerado que es la hora de que se haga escuchar nuestra voz y que la política deje de ser un asunto de solo políticos, para convertirse en un tema de los ciudadanos.

El Pueblo pone, y claro que lo hizo votando por ella y por la fórmula de Morena, para llevar a López Obrador a la presidencia, sin embargo la lógica debería de ser que el pueblo quita, cuando un gobernante o legisladora no cumple con las expectativas, o como es el caso de la Téllez, cuando una Senadora de la República traiciona absolutamente todas y cada una de las causas, programa ideológico y promesas de campaña que hizo.

Lilly Téllez de manera lamentable se convirtió en unos meses en el retrato perfecto de la traición ideológica y política, y seguramente ella hace desde ya sus cuentas en esa loca cruzada que ahora emprende y que ella considera que la podría llevar a ser postulada como candidata a la Presidencia de la República, a pesar de que hace unos meses decía que ella no quería hacer carrera política y que incluso podría retirarse del Senado a mitad de su mandato.

Hoy se ha convertido en un personaje delirante, que lo mismo gritonea histérica en el pleno del Senado, que después hace transmisiones en YouTube junto a otras legisladoras panistas, para mostrarse de cuerpo entero como lo que es, y esto no es poca cosa, porque Lilly desde hace tiempo perdió el pudor político y suelta barbaridad y media, ateniéndose a lo que ella interpreta como inmunidad y por tanto impunidad legislativa.

Creo es la hora en que los ciudadanos seamos escuchados, por eso la causa, por eso las firmas, en Sonora sentimos que Lilly Téllez no nos representa y no la queremos en el Senado de la República y claro, la expectativa de los ciudadanos, los firmantes, pero también de muchos miles más, es que finalmente los diputados escuchen el clamor, observen sus excesos y procedan a realizarle un juicio de desafuero a la senadora por Sonora.

Se sabe que el camino es complejo y azaroso, también que hay muchas resistencias en las altas esferas del poder, pero aquí se trata de abrir brecha y hacer que nuestra voz se escuche.

Insisto el pueblo pone, el pueblo debe poder decidir hasta cuándo toleramos ese tipo de abuso como el que protagoniza la senadora Téllez.