El pasado domingo quedó formalmente conformada la LXV Legislatura del Congreso de la Unión, la cual iniciará funciones el próximo 1 de septiembre y concluirá el 31 de agosto de 2024.
¿Qué esperar de este nuevo Congreso? Esta legislatura acompañará los próximos tres años del gobierno de AMLO. Por estas razones podemos prever lo que sigue:
Morena, con sus 198 diputados y 61 senadores, buscará la “consolidación” de la “cuarta transformación” mediante el respaldo a cualquier iniciativa que surja de de Palacio Nacional mediante su conocida sumisión a su líder político y moral. Para ello, debido a que no cuenta con mayoría calificada, ni en solitario ni con sus aliados electorales, deberá crear alianzas legislativas. Según trascendió luego de las elecciones, el PRI podría ser engatusado por al partido oficial.
El PAN, por su parte, con sus 25 senadores y 114 diputados, es el principal partido de oposición en el Congreso. Para contrarrestar a Morena, deberá trabajar sobre su ineficacia política y tendrá que echar mano de sus mejores bazas para mantener la alianza legislativa con el PRI y el PRD, en aras de evitar repetir el avasallamiento morenista de la legislatura precedente.
El PRI, con sus 7O diputados y 13 senadores, deberá resisitir las tentaciones de la alianza morenista si desea representar en 2024 una verdadera oposición al partido del presidente AMLO.
MC, por su parte, si bien logró importantes triunfos a nivel estatal, destacadamente la gubernatura de Nuevo Léon en manos de Samuel García, deberá sumarse a la oposición encabezada por el PAN. De lo contrario, se convertirá en un partido en las sombras; y de apoyar a AMLO y a los suyos, se descreditará como una opción viable para 2024.
El Partido Verde, desafortunadamente, continuará siendo representado con con 43 diputados y 7 senadores; haciendo de las suyas, absorbiendo dinero de todos los mexicanos, y saltando de un barco al otro según convenga a los intereses personales de los legisladores y de su dirigencia. Una pena.
Olga Sánchez Cordero y Sergio Gutiérrez Luna, ambos de Morena, presidirán el Senado y la Cámara de Diputados, respectivamente. Ellos serán claves indispensables para AMLO y sus enlaces para la negociación de acuerdos que encajen en los miopes proyectos legislativos del presidente.
En otra tesitura, la LXV Legislatura será la primera que contará con paridad de género, con el mismo número de diputados y diputadas. Esto debe celebrarse, pues representa un avance destacado en la historia parlamentaria de México. Por primera vez, las mujeres tendrán voz y voto en las decisiones más trascendentales para nuestro pais.
En suma, la LXV Legislatura deberá hacer frente a un presidente aún poderoso que no renunciará a su empeño de dominar a los poderes del Estado en un proyecto de gobierno que ha fracasado, pero que a la vez, impera en el imaginario colectivo.