Olav Kooij, de Visma | Lease a Bike, asegura su primera victoria de etapa en una Gran Vuelta tras una emocionante llegada en Nápoles. A pesar de un fuerte ataque en la última subida liderado por Jhonathan Narváez, Kooij emergió como el vencedor en los últimos cien metros, superando a los velocistas en una apretada batalla.
La etapa final previa al primer día de descanso del Giro de Italia 2024 se extendió por 214 kilómetros, ofreciendo un perfil más suave en comparación con la jornada anterior. Aunque solo hubo una subida categorizada, la etapa no fue plana, con cuatro ascensos cortos en los últimos cuarenta kilómetros, incluyendo el Monte di Procida (4,1 km al 3%), Lucrino (1,1 km al 6,7%), Solfatara di Pozzuoli (2 km al 4,9%) y Posillipo (3,2 km al 4,4%), con su cima situada a siete kilómetros de la meta.
La incertidumbre reinó en el pelotón sobre si la etapa favorecería a los atacantes o a los velocistas. Después de una neutralización y un pequeño retraso debido a un pinchazo de Roel van Sintmaartensdijk, los corredores comenzaron la etapa alrededor de las 12:20 horas.
Dos corredores del Team Polti Kometa, Mirco Maestri y Andrea Pietrobon, intentaron una escapada temprana, seguidos de cerca por Manuele Tarozzi (Grupo VF-Bardiani CSF-Faizanè). El pelotón permitió que la ventaja de los escapados creciera hasta los cuatro minutos, con Alpecin-Deceuninck liderando el ritmo para su velocista Kaden Groves.
Sin embargo, Davide Ballerini inició un contraataque, incitando a otros corredores a la acción. A pesar de algunos intentos de ataque, los equipos Alpecin-Deceuninck y BORA-hansgrohe lograron controlar la situación, manteniendo la carrera bajo control.
A pesar de los esfuerzos de los líderes, Maestri y Pietrobon fueron alcanzados por el pelotón justo antes de la subida final hacia Posillipo. Julian Alaphilippee fue el primero en atacar en esta ascensión, seguido por un pequeño grupo que logró abrir una brecha. Alaphilippe y Ewen Costiou mantuvieron su ventaja durante gran parte de la subida, pero fueron alcanzados por el pelotón justo antes de la cima.
En los últimos kilómetros, Jhonathan Narváez lanzó un poderoso ataque, manteniendo la delantera hasta los últimos metros.Sin embargo, la acción detrás de él fue intensa, con un sprint final en el que Milan y Kooij superaron a Narváez justo antes de la línea de meta. Kooij emergió como el ganador, asegurando una victoria emocionante en Nápoles.