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Al primer minuto del 13 de septiembre se dará la transición en Sonora y Alfonso Durazo encontrará su cita con un destino que pareció por años esquivarlo, sin embargo llega a ese encuentro en el momento justo.

Alfonso Durazo es un hombre de 67 años de edad, maduro y con una larga trayectoria como funcionario público, le ha tocado todo tipo de posiciones, desde secretario de estado con Andrés Manuel López Obrador, secretario particular de Vicente Fox y Luis Donaldo Colosio, director de área en la Secretaría de Gobernación, hasta la última posición que podamos imaginar en el organigrama.

Originario de Bavispe, un municipio perdido en la alta sierra de Sonora, vecino de Chihuahua y la zona fronteriza de Arizona y Nuevo México, Alfonso Durazo creció en lo que algunos llaman el viejo, lejano y salvaje oeste, una tierra agreste y con escasas oportunidades, de donde debió salir para estudiar primero la secundaria en Agua Prieta, la preparatoria en Hermosillo, y a la UAM en la Ciudad de México.

Antes debió ganarse la vida como pudo, incluso manifiesta haberse ido en dos ocasiones de ilegal a la muy cercana Arizona, en especial a Tucson, donde trabajó de lo que pudo, de lavaplatos y demás.

Alfonso Durazo es un hombre de pueblo, con origen en una familia de 12 hermanos, tuvo que trabajar desde muy joven para irse de Bavispe y abrirse un camino en la política.

Además de alto funcionario, ha sido diputado federal de representación proporcional en las elecciones del 2012, senador por Sonora en el 2018, dirigente estatal de Morena en Sonora de 2014 a 2018 y ahora gobernador de su estado, además es un exitoso empresario de la energía, pues junto a sus hermanos posee una empresa dedicada a la distribución de gas propano, precisamente en Agua Prieta.

Alfonso Durazo es lo que pudiéramos denominar un producto de la cultura del esfuerzo, su proyecto de rescatar Sonora y llevar al estado al carril de la “cuarta transformación” es una inquietud genuina.

En lo personal conozco al gobernador electo desde 1994, justo cuando llegó a Hermosillo tras el trágico asesinato de Luis Donaldo Colosio, recuerdo que montó una oficina por el Bulevar Navarrete, en ella tenía los archivos personales del extinto candidato presidencial del PRI, desde ahí fue empujando una incipiente carrera política que paulatinamente lo fue llevando por 27 años a recorrer los pasillos del poder y llegar a la cima.

Hoy está a punto de ser ungido gobernador de su estado.

Para ello el camino de Alfonso Durazo ha sido tan azaroso como puede ser la vida misma. Recorrió toda la geografía política, pues por fuerza debió ser militante del PRI con Colosio, después pasó por la esfera del panismo, al ser uno de los personajes más cercanos a Vicente Fox en la primera transición de México en la era moderna.

Alfonso Durazo está cerca de Andrés Manuel López Obrador desde que inició el trayecto del hoy presidente en su búsqueda por la transformación del país, le acompañó en el 2006 y en el 2012 y logró triunfar con él en 2018, y alcanzó su propio triunfo en este 2021.

Este lunes (6 de septiembre) el gobernador electo anunció una de las decisiones trascendentales de su gobierno, la integración de la mayor parte de su gabinete, y la verdad es que sorprendió a propios y extraños al integrar un equipo balanceado entre perfiles de Morena y de la sociedad civil, entre hombres y mujeres, entre políticos jóvenes y otros de larga experiencia.

De entrada sorprendió con la designación de Alvaro Bracamonte Sierra como secretario de Gobierno, un académico y economista que muchos daban como titular de la Secretaría de Educación o de la Secretaría de Economía. Al final se trata de una decisión que rompe el cuadro de lo tradicional y pinta un panorama de cambio en el manejo de la política interna de Sonora.

En Hacienda, la segunda posición más importante del gabinete, puso al joven Omar del Valle Colosio, a la fecha dirigente del PVEM en Sonora y quien se ha ganado su confianza.

Llamaron la atención las designaciones de 3 diputados federales en el gabinete, Lorenia Valles Sampedro en el DIF estatal, Wendy Briceño Zuloaga en Desarrollo Social y Heriberto Aguilar Castillo en Infraestructura, también el nombramiento de Olga Armida Grijalva como secretaria del Trabajo, una academia y sindicalista de izquierda de larga trayectoria.

Completan el cuadro la ex alcaldesa de Hermosillo Celida López Cárdenas en Turismo, José Luis Alomía en Salud, Fátima Rodríguez en Agricultura, Guillermo Noriega en la Contraloría, Adolfo Castro Valdez en la coordinación del gabinete, mientras que dejó pendiente la designación de los titulares de las Secretarías de Educación, Seguridad Pública y Economía, secretario particular, director jurídico, coordinador de Comunicación Social y la nueva Secretaria de Atención Ciudadana y Protección Civil.

La nueva historia de Sonora y Alfonso Durazo se escribirá a partir del lunes.

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