No hay día sin que una persona se vista de “experto”, y haga una disertación en redes sociales sobre temas aeronáuticos. Quiero hablar de los pasajeros, sí, esos que, con cámara del teléfono celular en mano, registran todo lo que pasa a bordo, y califican si los procedimientos llevados a cabo por los pilotos y los sobrecargos son correctos… aunque no tengan idea.

Y es que se acaba de dar un caso muy “curioso”, al grado que se hizo viral en distintos medios aeronáuticos. No daba crédito a lo que estaba leyendo; es más, Agencia Federal de Aviación de los Estados Unidos, ¡hazte a un lado! que ya llegó nuestro pasajero estrella, que con un hilo de Twitter nos va a dar una cátedra sobre el procedimiento del armado del tobogán.

Pasajero de Volaris se alarma por un “safety pin”

Resulta que en un vuelo, un pasajero se percató de la existencia del “safety pin”, que se utiliza en las puertas de los aviones. Sin saber para qué sirve, leyó la leyenda impresa en el listón que cuelga del pin de seguridad, que decía: “Remove before flight”.

Y ni tardo ni perezoso, sacó su teléfono y grabó un video, que subió a su Twitter junto con el siguiente comentario:

“En este vuelo a @viajaVolaris se le olvidó quitar esto que ahí dice debe quitarse antes de volar. El espacio aéreo en México es un desastre en todo sentido. Urge ponerle atención en serio antes de que ocurra una desgracia.”

Pasajero de vuelo de Volaris

Para empezar, el “espacio aéreo” es la región de navegación aérea. Afirmar que es un “desastre en todo sentido” es equiparable a decir que los océanos son un caos inmenso… y mojado. Es obvio que el autor del tuit se refiere a la regulación del espacio aéreo, que le corresponde, evidentemente, al Gobierno Federal.

Pero es necesario aclarar una falsa premisa que se repite en muchos foros: si la aviación de México está degradada a Categoría 2, se debe en su mayoría a temas administrativos (relacionados con la burocracia y el rezago en dependencias como Medicina de Aviación, Licencias, entre otros); a falta de inspectores y a los bajos salarios del personal. Dejemos claro esto: la Federal Aviation Administration (FAA) de los Estados Unidos no evalúa la seguridad de las aerolíneas mexicanas, sino la supervisión del gobierno.

Dicho lo anterior, regresemos al comentario de nuestro “experto”; él leyó “Remover antes de volar”, y supuso que el pin de seguridad no debía estar ahí colocado. Algunos usuarios de la red social trataron de explicarle que no había nada mal hecho, entonces en su hilo de Twitter continuó su perorata:

“Muy bien, ¿entonces por qué trae una indicación que se quite antes de volar?”

Pasajero de Volaris

Sucede que nuestro estimado “experto” no se percató de que, cuando los sobrecargos armaron el tobogán (procedimiento que se hace en todos los vuelos), el pin de seguridad estaba “del lado izquierdo, junto a la palanca” y que tras bajar la palanca de armado, quitaron el “safety pin” y lo colocaron en el lugar correcto, esto es, del lado derecho de la puerta, como ordena el manual del equipo A321, en el que esta persona iba a viajar.

El sobrecargo sabe cómo funciona el armado del tobogán

Todo tiene lógica. Al ser colocado ahí el pin, el sobrecargo sabe que el tobogán está armado para una emergencia; es una señal visual para los tripulantes de cabina, pero eso lo desconoce nuestro experto en aviación, quien pasó un buen rato insistiendo que la leyenda del pin de seguridad no dejaba lugar a dudas.

Su empecinamiento fue tal, que creó una narrativa argumentando que todo era consecuencia del rediseño del espacio aéreo, por eso los sobrecargos estaban cansados y no habían quitado ese pin de seguridad, mismo que le estaba generando mucha ansiedad al pasajero y experto aeronáutico en cuestión.

Discutió durante horas con infinidad de internautas; algunos de ellos fueron personas del medio aeronáutico, que le aseguraron que no había nada mal hecho, que no debía preocuparse, que el avión no se iba a caer por no haber quitado el aditamento con la intimidatoria leyenda de la puerta del avión. Finalmente lo aceptó:

“Respecto a este tuit: Me dicen que el seguro está bien colocado que la etiqueta “REMOVE BEFORE FLIGHT” corresponde para cuando el seguro está a la izquierda. Pero que ahí va bien. Lo tomé como un descuido, pero no lo es. Ojo, eso no quita que el espacio aéreo sea un desastre. :(

Me queda claro que este pasajero fue un hueso duro de roer y que levantó ámpula dentro del gremio aeronáutico con su tuit. Pero hay que decirlo, a ningún pasajero se le puede exigir que conozca cuáles son los procedimientos de seguridad para la apertura, armado/desarmado de un tobogán en un equipo A321.

Sin embargo, usted como pasajero debe tener la confianza que el personal a bordo, que está a su servicio, no es un improvisado; que cada año tiene adiestramientos periódicos, donde precisamente se refuerzan esos procedimientos que cambian dependiendo del modelo de equipo que se trate. Les puedo jurar que se trabaja mucho en el armado/desarmado de tobogán, porque las puertas de los equipos son diferentes.

Lo que sí deben saber, es que antes de que los pasajeros suban al avión, los sobrecargos ya revisaron la presión de las puertas, ya que en apertura normal, se abre de forma manual, y en emergencia lo hace de forma neumática. Antes de volar se comprueba que la presión de la puerta este en rango verde o 1800 PSI (Pound-force per Square Inch, libras por pulgada cuadrada) dependiendo del modelo de puerta.

El personal a bordo cuenta con una licencia que expide el gobierno federal para fungir a bordo como tripulante, y para obtenerla debes asistir y acreditar cursos de capacitación y actualización cada año. También debes tener la licencia que otorga la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).

Ellos cuentan con la capacitación adecuada y saben cuáles son los procedimientos correctos. La confianza que pido para ellos va de la mano con mi solicitud de que no interfieran en las funciones de los sobrecargos.

Imaginen que un pasajero opta por mover el pin porque ahí dice “Remove before fligth (remueva antes del vuelo)” y lo coloca donde está la palanca de armado y desarmado del tobogán. Si la aeronave no tiene ninguna emergencia a bordo que requiera evacuar la aeronave, no pasará nada, pero cuando el avión aterrice, el sobrecargo verá el pin está en otro lado, y abrirá la puerta, porque visualmente le está avisando que el tobogán ha sido desarmado.

¿Saben qué es lo que pasaría?, se desplegaría un tobogán que se infla en menos de 7 segundos, con la fuerza suficiente para matar a cualquier persona que se encuentre en la plataforma. No solo eso, el avión quedaría varias horas inhabilitado, hasta que llegue personal de mantenimiento para volver a guardar el tobogán. No exagero, el costo de hacerlo no baja de los 10 mil dólares.

Yo sé que está bien tener dudas, y lo mejor, antes de publicarlas en sus redes sociales, lo mejor es preguntarle directamente al sobrecargo. Sin embargo, en el tema de las puertas, déjenme ser celosa de mi profesión: no es competencia de los pasajeros investigar el manejo de las puertas, porque no faltará el pasajero que por curioso la quiera abrir.

Los sobrecargos son autoridad dentro del avión

Respeten a los tripulantes de cabina y el trabajo que hacen a bordo, ellos saben lo que hacen; “zapatero, a tus zapatos”, yo no intentaría corregir el diagnóstico de un médico, los planos de un ingeniero, o la estrategia bélica de un militar. Los sobrecargos, dentro del avión, son personal de seguridad, y autoridad. Por supuesto que no son máquinas infalibles, son humanos… pero publicar conclusiones sin sustento y fuera de contexto, solo para para darle mayor peso a una fobia política, es demasiado.