Berlín.- Un total de 306 vuelos de la aerolínea alemana Lufthansa ha sido cancelados hoy por la nueva jornada de huelga del personal de cabina de esa compañía aérea, centralizada en los aeropuertos de Berlín, Fráncfort y Múnich.

El mayor número de cancelaciones, unas 220, tuvo lugar en vuelos que partían o iban destinados a Fráncfort, el aeropuerto de mayor tráfico aéreo del continente, lo que afectó a aproximadamente la mitad de los trayectos domésticos o europeos, según fuentes de la compañía gestora del aeródromo, Fraport.

Los paros afectaron en primer lugar al aeropuerto de Tegel de Berlín, donde el personal en huelga se inició a las 05.00 hora local (03.00 GMT) y tenía previsto prolongarse hasta las 13.00 hora local (11.00 GMT).

En Fráncfort, la huelga se programó a partir de las 06.00 (04.00 GMT) y hasta las 14.00 hora local (12.00 GMT), mientras que se prevé que Múnich se sume a la medida a las 13.00 horas (11.00 GMT) y se prolongue hasta la medianoche (22.00 GMT).

El sindicato Ufo exige mejoras salariales para el personal de cabina y la renuncia de la principal aerolínea europea a contratar personal externo para reducir costes.

La campaña de huelgas se abrió el pasado viernes en Fráncfort y se extendió hoy al aeropuerto berlinés de Tegel y al de Múnich.

UFO acusa a la patronal de "arrogancia", por no haber ofrecido mejoras sustanciales a su oferta de partida, y amenaza con generalizar la huelga a todos los aeródromos donde opera esa aerolínea.

Un portavoz de Lufthansa señaló que la huelga de hoy es desproporcionada y atenta directamente contra los intereses de los pasajeros, principales perjudicados de las medidas de protesta.

La primera jornada de la huelga el pasado viernes, de ocho horas de duración, provocó un caos en Fráncfort, donde Lufthansa se vio obligada a cancelar unos 200 vuelos y el paro provocó numerosos retrasos en otros enlaces, también en terceras compañías.

La compañía aérea alemana ha comunicado, entre tanto, que tratará de prepararse lo mejor posible para hacer frente a los nuevos paros, si bien reconoció que el margen de seis horas para la convocatoria es muy reducido para intentar de minimizar sus efectos.

El sindicato Ufo juega con el factor sorpresa y, pese a haber decidido ir a la huelga a mediados de la semana pasada, avisa de los puntos donde se realizan los paros con unas horas de antelación.

Con ello trata de evitar que la aerolínea reduzca los efectos de la huelga con el apoyo de otras compañías asociadas o personal subcontratado.

El sindicato UFO anunció el pasado martes el inicio de los paros tras el fracaso de las negociaciones con la dirección de la mayor compañía aérea de Europa y tras consultar a sus afiliados, que respaldaron mayoritariamente la huelga.

Tras tres años de congelación salarial y 13 meses de negociaciones infructuosas, Ufo exige para el personal de cabina de Lufthansa aumentos salariales del 5 % y el compromiso de la misma de no contratar personal externo.

El sindicato sectorial representa los intereses de la mayoría de los 19.000 empleados de cabina de Lufthansa y por ahora no incluirá en sus paros a los trabajadores de las filiales Cityline, Eurowings y Germanwings.