México.- El obituario de una mujer culpa a los no vacunados de su muerte por Covid-19, ocurrida el pasado 3 de septiembre en Illinois, Estados Unidos.

Fue la familia de Candace Cay Ayers la que se encargó de dar a conocer a través del obituario que la mujer murió de Covid-19, tras ser infectada por los no vacunados.

“Ella fue vacunada, pero fue infectada por otras personas que decidieron no hacerlo. El costo fue su vida”

Obituario de Candace Cay Ayers.

Sus familiares piensan que la mujer se contagió de Covid-19 en julio, cuando visitó a un amigo no vacunado en Mississippi. Alí el motivo de su obituario.

Según el medio Today, Candace Cay Ayers había recibido ambas dosis de la vacuna, pero sufría de artritis reumatoide y estaba inmunodeprimida, por lo que pudo estar en mayor riesgo de morir por Covid-19.

Candace Cay Ayers

Obituario de víctima de Covid-19

Candace Cay Ayers murió de Covid-19 en Illinois, Estados Unidos. Estaba protegida, pero visitó a un amigo que se negó a ponerse la vacuna y ahora su familia lo culpa a él en su obituario.

“Ojalá hubiera una mejor ciencia en ese momento que dijera que tal vez deberían quedarse en casa, tal vez estas precauciones son buenas para las personas normales, pero no para los inmunodeprimidos”

Obituario de Candace Cay Ayers.

Cuando la mujer hizo el viajó a Mississippi, creía que los casos graves de Covid-19 en personas vacunadas eran muy raros; no obstante, ahora sus familiares arremetieron contra todos los no vacunados.

“Ojalá los médicos no hubieran autorizado a mi madre a viajar a Mississippi; hicimos todo lo que nos aconsejaron”

Obituario de Candace Cay Ayers.

Candace Cay Ayers y su esposo dieron positivo a Covid-19 pocos días después de regresar de su viaje. Finalmente, ella fue ingresada en el hospital con neumonía y luego la colocaron en un ventilador.

“Mamá era una luchadora y estaba tan enojada con la gente por no vacunarse y no usar cubrebocas. La última semana que estuvo viva, sus pulmones estaban completamente blancos en la radiografía”

Obituario de Candace Cay Ayers.