A través de su cuenta oficial en Instagram, el cantante del ‘Cartel de Santa’ Babo presumió su exótica mascota.

‘Kambo’, como llamó el rapero de 44 años de edad, Babo, a su mascota, especie en peligro de extinción, es una pantera negra hembra.

¿Es legal tener a una pantera como mascota?

A pesar de que como se mencionó la pantera negra es un animal en peligro de extinción, en México es completamente legal tener a uno de estos ejemplares.

Sin embargo, para ello se deben cumplir varios requisitos y contar con varios permisos legales, los cuales es bien sabido Babo posee.

Y es que esta no es la primera vez que el rapero presume a su mascota, por lo cual en ocasiones anteriores ha revelado varios datos sobre esta.

En esta ocasión el rapero compartió en las historias de su Instagram varios videos en donde la pantera de casi 5 años aparece jugando con una pelota de piedra.

Babo

Momentos después, el animal comienza jugar con la pierna del rapero, quien deja que su ‘gatita’ lo muerda.

Sin embargo, aunque el animal muerde de manera constante al rapero mexicano, él ya ha aclarado que es así como su mascota demuestra su cariño.

Pues cabe recordar hace un año, en redes sociales varios usuarios so mostraron preocupados por las conductas de la pantera hacia Babo.

¿Qué se necesita para tener una pantera como mascota?

De acuerdo con la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, se pude tener un animal exótico, como una pantera, como mascota siempre y cuando se realice un trámite legal y se tengan las condiciones adecuadas.

Para ello se necesita:

  • Identificación oficial vigente
  • Acta Constitutiva o Poder Notarial
  • De ser el caso, Poder Notarial o nombramiento para representantes legales
  • De ser el caso, la representación de las personas físicas deberá acreditarse mediante carta poder firmada ante dos testigos
  • Documentación que acredite la legal procedencia de los ejemplares a registrar
  • Formato de autorización de animales exóticos
  • Carta compromiso en la que el interesado asuma la responsabilidad en el cuidado del ejemplar, así como la obligación de informar a la Secretaría sobre la defunción del mismo y sus causas.