Es el diagnóstico, correcto en mi opinión, que ha hecho la familia Junco de la Vega, propietaria de los diarios El Norte, de Monterrey; Reforma, de la Ciudad de México, y Mural, de Guadalajara.

Antes de entrar en detalles acerca de la evaluación que en tales periódicos se ha hecho del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y del de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, vale la pena comentar otra vez que la familia Junco de la Vega publica sus comentarios con dos seudónimos distintos: “El Abogado del Pueblo” en El Norte y “Manuel J. Jáuregui” en Reforma y Mural.

Manías al margen, la santísima dualidad del Grupo Reforma —un columnista único que existe como dos personas distintas— ha dicho sobre Videgaray y Osorio que “hicieron la chamba” porque:

1.- Se enojó “el portador del peluquín color pelo de elote”.

2.- A los citados funcionarios “no los elogiamos, simplemente afirmamos que cumplieron, y esto no por las críticas de la oposición, sino por la forma enfermiza en la que reaccionó Donald Drump tan pronto como sus enviados a México, Tillerson (petrolero ex director de Exxon Mobil) y Kelly, buscapleitos profesional, regresaron a Washington con el reporte de cómo les había ido en su visita”.

3.- “El enojo del hombre color naranja es símbolo de que NO consiguieron sus enviados lo que querían, o sea doblar a México”.

4.- “Basta leer su librejo (que no escribió él, sino que fue producto de conversaciones que tuvo con su ‘escritor fantasma’) The Art of the Deal (algo así como el arte de negociar o de lograr un trato) para saber que el estilo del bully que ocupa actualmente la Oficina Oval es tirarse con todo a matar, de arranque, y si encuentra resistencia, aflojar”.

5.- “Una cosa es guardar las formas de la diplomacia y otra muy distinta ofrecer las sentaderas, cosa que, como les decimos, el ENOJO del misógino ocupante de la Casa Blanca (la de Washington, D.C.) indica que no sucedió. Y esperamos no suceda”.

6.- “La razón moral, la razón histórica, están de nuestro lado: no tienen, pues, por qué aflojar la Krispy Kreme nuestros funcionarios, ahora sí que, en este caso, los que andan mal —y muy mal— son los vecinos”.

La reunión

Tiene toda la razón el periodista de los dos nombres (“El Abogado del Pueblo” y “Manuel J. Jáuregui”). Analicemos lo qué pasó, tal como lo narran personas perfectamente al tanto de los detalles del encuentro.

Los secretarios Kelly y Tillerson vinieron a México convencidos de la importancia estratégica que tiene nuestro país para Estados Unidos y de la necesidad de ir generando acuerdos y entendimiento, más allá de la situación política. Esto lo expresaron con toda claridad en la reunión. 

Durante las pláticas, se dejó claro que el gobierno de México tiene interés en una negociación integral. Es decir, que no estamos dispuestos a llegar a acuerdos concretos en los temas que ellos tienen mayor interés, si no se abordan también los temas de interés de México.

Lo anterior es de particular relevancia, ya que de lo contrario el tema comercial, que es de gran interés para México, pasaría a segundo término en la agenda estadounidense.

La reunión fue cordial y respetuosa, pero ambas partes dejaron clara su postura. Sobre todo en lo puntos más complejos de la agenda bilateral.

Si bien los colaboradores de Trump  expusieron su intención de evaluar y avanzar en un mecanismo que permita el envío a la frontera mexicana de migrantes de otras nacionalidades que hayan ingresado por esa vía irregular, el canciller Videgaray y el secretario Osorio negaron tajantemente siquiera la posibilidad de discutir esta medida.

Ante ello, el secretario Kelly fue particularmente receptivo. Señaló que, si las leyes mexicanas no lo permiten, no insistirían en el tema.

El Secretario Osorio ahondó en la importancia estratégica que tiene México para Estados Unidos en materia de seguridad, y los resultados que se han logrado a partir de la colaboración con el gobierno anterior.

Los dos secretarios estadounidenses mostraron gran interés en la necesidad de profundizar esa colaboración. Y, nuevamente, los secretarios mexicanos plantearon la necesidad de enmarcar estos temas en una negociación integral de la agenda.

Al término de la reunión, las comitivas tuvieron conocimiento de las declaraciones del presidente Trump expresando la característica de “militare” de las nuevas medidas en materia migrante.

Los secretarios Kelly y Tillerson mostraron gran sorpresa y preocupación por dichas declaraciones.

Las disculpas de Kelly y Tillerson y la propuesta del secretario de Kelly por precisar el dicho del presidente Trump y explicar los alcances lograron restablecer las condiciones de diálogo e hicieron posible la posterior rueda de prensa.