El eufemismo que los columnistas políticos tenemos que usar, presionados por la protesta postelectoral de AMLO, es decirle al que será el próximo presidente de México, Enrique Peña Nieto, “el candidato que obtuvo mayoría de votos en las elecciones”, hasta que el Tribunal Electoral no se pronuncie en el sentido de si acepta o rechaza la impugnación presentada por los partidos que integraron la coalición del Frente Progresista.

Pues bien, el candidato que obtuvo la mayoría de votos en las elecciones, utilizando el eufemismo que nos permite guardar las formas, ya está perfilando su gabinete.

Se asegura que revisando tan solo mil 109 casillas, el TEPJF se ahorró un importante tiempo y puede emitir su resolución en los días iniciales de la semana que inicia el inminente 13 de agosto. Por eso la gabinetología empieza a desbordarse.

EPN se comprometió a ejercer un gobierno eficiente y de resultados. Esa es la razón de que haya conformado un reducido grupo de personajes para que le apoyaran en los trabajos de este episodio, que es el primero de los que se habrán de cumplir hasta su llegada a Los Pinos. Así está guardando celosamente sus cartas.

En las secretarías claves EPN ha dejado ver cerca de él a políticos que encajan en el perfil que se necesita para cumplir sus compromisos de campaña.

En Gobernación los nombres más recurrentes son Pedro Joaquín Coldwell y Jesús Murillo Karam (del hidalguense se dice que podría inicia el 1 de septiembre como coordinador de la fracción priísta en San Lázaro). El emergente para ese cargo, Gobernación, que más se ha visto es Alfonso Navarrete Prida.

En Hacienda la apuesta es por Luis Videgaray Caso. Los enredijos que dejó el señor Agustín Carstens no los ha podido componer del todo el eficiente José Antonio Meade. Por esa razón, en el supuesto de que se transformara a la Oficina de la Presidencia en la Jefatura del Gabinete, Luis Videgaray la ocuparía sin duda. Puestos en ese escenario la repetición de Meade en Hacienda es casi un hecho.

En Relaciones Exteriores el cargo está casi amarrado para Emilio Lozoya. Ha estado realizando todos los trabajos en materia exterior para EPN y su último logro fue que hasta William Clinton felicitara a su jefe por haber ganado las elecciones presidenciales.

Un diario de circulación nacional esparció la especia de que Relaciones exteriores también la busca el ex procurador Eduardo Medina Mora, tal vez apoyado por su gran amigo Carlos Salinas. Eso está más bien en el terreno de la grilla que de la gabinetología informada.

Para la super secretaría de Energía que subsumirá a todas las paraestatales que converjan en el ramo (PEMEX, CFE y la Comisión del Agua) el único nombre mencionado hasta ahora por las fuentes de peso es el del Dr. Pedro Aspe Armella.

En Economía han empezado a sonar dos nombres que son conocedores del tema. Liébano Saénz y Pedro Noyola. El emergente es Carlos Rello Lara.

Turismo parece que se la disputan los yucatecos Ivonne Ortega Pacheco y Emilio Gamboa Patrón, llevando clara delantera la gobernadora.

Para Educación se habla de la probable incorporación de Juan Ramón de la Fuente o de la maestra Rosario Robles. Ambos conocedores tanto del tema educativo como de la grilla estudiantil que tendrá que lidiar igual con rechazados que con los del #Yo Soy 132 y la CNTE. Que son lo de menos. Lo difícil es contemporizar con la maestra Elba Esther Gordillo.

En SEDESOL todo indica que irá el hidalguense Miguel Osorio Chong, si es que no lo dejan muy golpeado los líos en que se ha y lo han metido. El posible bombero en caso de que Osorio Chong no alcance a recuperarse totalmente, es Jorge Carlos Ramírez Marín, quien es además mencionado para ocupar la clave secretaría de la Función Pública.

PGR parece dedicada a Alfonso Navarrete Prisa, pero ante la posibilidad de que fuera designado secretario de gobernación, EPN ha encontrado bien el trabajo de la Maestra Marisela Morales.

El próximo domingo le proporcionaremos a nuestros improbables lectores, las versiones que existen acerca de los que pueden ocupar los otros cargos del gabinete de EPN.