Sin que haya transcurrido el tradicional periodo de los cien días en que los gobernantes de los tres niveles, federal, estatal y municipal, invariablemente  suelen informar a la sociedad en este breve lapso sobre los avances de sus respectivos programas de gobierno, posiblemente como una muestra de cumplimiento de promesas de campaña política o tan solo como una probadita nada más de los grandes beneficios que le esperan a la sociedad, pues resulta que en el caso de Naucalpan viene a ser la excepción a esta regla no escrita, porque su Presidenta Municipal, Arquitecta Patricia Durán Reveles, seguramente ha encontrado motivos más que suficientes para realizar un acto masivo de esa naturaleza, pero no a los cien días como ha sido la costumbre de los políticos, sino a los 30 dias de iniciado su gobierno. Sí, ha convocado a la ciudadanía o a la población en general, a una asamblea pública, a realizarse mañana sábado, a las nueve horas, en la explanada del palacio de gobierno municipal.

Pero tal pareciera que dada la premura del evento, habrá de ser algo sumamente importante que la carismática e inteligente alcaldesa, Patricia Durán Reveles, querrá comunicar a los habitantes de Naucalpan. Quizá sin elucubrar, pero sí tratando de anticiparnos, podría ser que su mensaje sea una especie de denuncia pública, en el que dé a conocer el  municipio que recibió por los efectos anómalos de la desmesurada corrupción en que incuestionablemente incurrió la administración que le antecedió. Pues se sabe que  le dejaron un municipio sumido en excesivas deudas, seguramente  impagables en tan solo un trienio.

En este sentido afirman los conocedores de tal situación, que existen infindad de compromisos a pagar sin que se cuente con los recursos económicos suficientes, entre ellos el referente a un gran número de juicios laborales que jurídicamente son irreversibles, por lo que se encuentran en su etapa final de ejecución, circunstancia que significa únicamente cubrir sus montos ecónomicos por salarios caídos que seguro ascienden a cantidades exorbitantes. Esto habrá de significar que el municipio tenga que realizar erogaciones millonarias que afectarán los programas sociales de gobierno y más aún cuando seguramente no se tiene la suficiencia presupuestaria.

La acumulación de basura por todo Satélite sin que se atendiera este servicio público básico durante todo el mes de diciembre que de forma dolosa le dejó la administración que salió, lo cual se interpretó como una agresión directa a la ciudadanía, problemática riesgosa por su grado de insalubridad, que según reportes periodísticos fue como una montaña de cinco mil toneladas de desechos que ya se terminaron de recoger y que se virtieron en los depósitos correspondientes. No se diga la inseguridad pública que se disparó en sus índices de incidencia delictiva como nunca antes vista en Naucalpan, y todo ello por un gobierno municipal corrupto hasta decir ¡basta!, que para fortuna de los naucalpenses lo echaron a la calle a punta del voto ciudadano.   

 Bueno, por las circunstancias que sean, también amerita señalar que las cuestiones de gobernabilidad no siempre resultan ser fáciles, ni mucho menos ser miel sobre hojuelas, pero con la dulzura que también le caracteriza a Paty Durán Reveles por su estilo agradable y ameno de comunicarse con la ciudadanía, seguro que su mensaje de mañana sábado no será amargo, sino todo lo contrario, habrá de ser optimista, motivante y alentador, porque con su acertada visión para gobernar, seguro que pronto sabrá sobreponerse a la adversidad crítica en que se encuentra inmerso el municipio de Naucalpan, y ojalá que ante esa situación tan apremiante como lo es la inmensa deuda que ahoga a esa alcaldía, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, dirija su mirada hacia esa municipalidad y no deje sola a la brillante alcaldesa. Lo veremos.    

Pálida tinta: Tomás Pliego, Coordinador del Gabinete de Seguridad Pública en el gobierno de la Dra. Claudia Sheinbaum, empieza a dar buenos resultados, tales como el hecho de haber formado un sistema de 800 cuadrantes de seguridad pública distribuídos territorialmente en nuestra Ciudad, asi como también se ha implementado un programa de desarme voluntario a cambio de estímulos económicos, mismo que al parecer está respondiendo a las expectativas proyectadas. Todo ello por la tranquilidad de los agobiados capitalinos, por lo que de inicio los resultados podrán apreciarse como satisfactorios, amén de que emanan de tan solo dos acciones eficaces, ¿Qué será cuando se instrumenten más acciones en esta materia? Ojalá y pronto se de eso.