Dos fiscales estadounidenses abrieron este miércoles dos investigaciones después de que Uber revelará haber sufrido un robo masivo de información en el que fueron afectados al menos 57 millones de usuarios en el mundo, entre ellos 600 mil socios conductores.

Eric Schneiderman y George Jepsen, fiscales de Nueva York y Connecticut respectivamente, abrieron sus respectivas carpetas de investigación, aunque el objetivo de estas aún no ha sido detallado.

El director general de Uber a nivel global, Dara Khosrowshahi, confirmó que entre la información obtenida por los atacantes no se encontraban los trayectos realizados, números de tarjeta de crédito, cuentas bancarias o números de seguridad social.

La compañía pagó con anterioridad una multa de 20 mil dólares por no haber revelado un ataque similar que tuvo lugar en el 2014, donde el objetivo principal fueron las cuentas de una gran cantidad de socios conductores.

Con información de AFP.