Con la salida de varias grandes compañías del programa de anuncios de YouTube debido a que sus anuncios comenzaron a aparecer en videos inapropiados o con contenido racista, la plataforma de videos en streaming ha decidido actualizar las reglas que permiten a los creadores de contenido generar ingresos.

La compañía ha prometido a los anunciantes que les dará mayor control sobre la forma en que sus anuncios son visualizados por los usuarios y a la vez, les ha dado a los “YouTubers” las normas que deben seguir si desean que sus videos sean elegibles para los anuncios.

Para ello, YouTube ha creado tres nuevas categorías de videos que no son “amistosos” para los anunciantes:

Contenido de Odio

Uso inapropiado de personajes de entretenimiento familiar

Contenido incendiario y degradante

De estas nuevas categorías, la tercera llamada “Contenido incendiario y degradante” posiblemente se convertirá en la más polémica, pues desde sus inicios la plataforma se ha valido de la delgada línea entre la comedia y el acoso para generar vistas.

Hay que aclarar que estas medidas no impedirán que los creadores sigan subiendo videos que entren en estas categorías, pero ya no convertirán las vistas en dinero contante y sonante para ellos.