IRREVERENTE

Les platico:

Algunos fueron o siguen siendo familiares.

Otros, amigos, conocidos, cercanos o medio lejanos.

“Tal Cual” escribió hace poco un colega: hoy, son muy diferentes a los de antes, hablando en términos generales.

De la discreción, sobriedad y hasta el misterio inherentes a su filosofía, pasaron ahora a la más escandalosa, descarada, descarnada y beligerante ostentación, poniéndose los pins y los emblemas de su organización hasta en los calzones.

Esos valores de pulcritud, fraternidad y respeto a los demás se los pasan ahora por debajo, como lo hizo Natanael Cano Monge, al usar sin permiso y con el descuido -hay que decirlo- de la jerarquía masona de Nuevo León, sus instalaciones y ornamentos para burlarse del significado de la Gran Logia.

¡Es masón!

El exabrupto y la irreverencia que cometieron él y sus secuaces resultó en una doble afrenta, porque acabo de descubrir que el mentado Natanael... es masón.

Pero él no es el único incongruente que pulula entre los miembros de la Gran Logia de NL.

También hay uno -al menos- que le pide a su amigo, “ándale, tómame una foto así (en guardia, mostrando desafiante sus puños) y se la envías al Justo”, y el otro manso y obediente lo hace y no solo eso, sino que la publica en un chat que muy a duras penas administra.

Y sucedió que la foto del bravucón tardío -por su avanzada edad-  Víctor González, posando como pugilista callejero, con sus tres pins mostrados ostensiblemente, se las dedica Beto Frías a Justo Elorduy Hevia y a quienes no comulgan con sus ideas y preferencias políticas en el chat de marras.

Y para joderse aún más -ellos mismos, por supuesto- tal cosa ocurre en plena celebración del cumpleaños de Clara Luz Flores Carrales, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

O sea, contraviniendo uno de los postulados de la masonería respecto a los grupos políticos que no deben formarse ni alentarse en el seno de dichas organizaciones.

Como me dijo el Gran Maestro de una de las grandes logias del centro de México:

“Si se quieren inmolar ellos mismos, muy su gusto y que lo hagan, pero que respeten los protocolos y los rituales de la masonería universal y no se lleven entre sus pezuñas la grandeza masona”.

Símbolos masones/Foto: Plácido Garza

CAJÓN DEL SASTRE DE PANAMÁ.

“¡Es cuanto!”, remata la irreverente de mi Gaby.