Sin duda Tiempo de mujeres. Me equivoqué por pensar que las ministra Norma Lucía Piña Hernández no tenía los votos para ganar la elección en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Consejo de la Judicatura Federal. Los tenía, sin duda.

A Piña Hernández no le resultó sencillo derrotar al candidato señalado por AMLO como un jurista cercano a los grupos conservadores, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ella ganó por un marcador de seis votos contra cinco.

La corte suprema, para reafirmar su autonomía. claramente decidió apoyar a quien menos ha votado a favor de los proyectos de la 4T. Supongo que eso fue correcto.

¿Cómo se llevará Norma Lucía Piña Hernández con Andrés Manuel López Obrador? Pienso que institucionalmente de una manera correcta.

Una pena que el proceso de renovación de la presidencia del poder judicial haya estado manchado por la guerra sucia contra una mujer, Yasmín Esquivel Mossa.

Sigo pensando que el tema de su tesis, en el peor de los casos para ella, fue un pecado de juventud perfectamente perdonable. ¿Nadie está libre de pecado? Insisto en recomendar el bolero: “En este mundo tan profano quien muere limpio no ha sido humano”.

El linchamiento mediático contra Yasmín obligó a AMLO a hablar de la elección en la corte, y cuestionó duramente a Gutiérrez Ortiz Mena.

¿Las críticas de un presidente de izquierda perjudicaron o beneficiaron a un ministro como Ortiz Mena identificado con la derecha? Probablemente le dieron más votos de lo que Alfredo Gutiérrez originalmente tenía. Nunca se sabrá. El hecho es que Alfredo se quedó cerca de ganar.

Una pena que no haya conseguido los votos que buscaba un jurista de excepción del que todo el mundo habla bien, Alberto Pérez Dayán.

El triunfo de una mujer en la corte se suma a otras grandes victorias femeninas:

√ La economista que encabeza el Banco de México, Victoria Rodríguez Ceja.

√ Un número histórico de ministras en la propia corte, la ya presidenta, la mencionada Yasmín y dos estudiosas del derecho realmente serias, Loretta Ortiz y Margarita Ríos Farjat.

√ Más gobernadoras que en ningún otro periodo.

√ La posibilidad real de que este año las dos entidades más grandes sean gobernadas por mujeres, Claudia Sheinbaum la Ciudad de México y, muy probablemente, Delfina Gómez el Estado de México.

√ La posibilidad absolutamente real de que las elecciones presidenciales del próximo año enfrenten solo a mujeres, Claudia Sheinbaum —líder en las encuestas— por Morena, y Beatriz Paredes por la alianza opositora.

Tiempo de mujeres, ni duda cabe. No puede ser malo para México. De hecho, se trata de lo mejor que podría estar pasando.

Arrancó bien el 2023 y todavía será mejor.