¿Hasta cuándo la derecha va a abusar de la paciencia de AMLO y Beatriz? Sí, estoy parafraseando a CicerónQuo usque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?—, el de aquel discurso memorable pronunciado después de ser descubierta la conjura encabezada por Catilina para dar un golpe de estado en Roma:

  • ¿Hasta cuándo la gente de derecha y sus intelectuales va a abusar de la paciencia de la 4T…?
  • ¿Cuándo nuestra democracia se verá libre de sus sediciosos intentos en redes sociales?
  • ¿A qué extremos su desenfrenada audacia arrojará a la derecha mexicana, a sus periodistas, sus empresarios, sus tuiteros?
  • ¿No arredra a la derecha ni la alarma del pueblo ni el acuerdo de todas las personas honradas?
  • ¿No comprende la derecha que sus designios están descubiertos?
  • ¿No ve su conjura fracasada por conocerla ya todos?
  • ¿Imagina la derecha que AMLO ignora lo que ha hecho en Guadalajara, en la universidad del señor Padilla…, a quiénes convocó y qué resolvió?
  • ¡Oh qué tiempos! ¡Qué costumbres! ¡La opinión pública sabe esto, lo ve el periodismo, y, sin embargo, la derecha insiste cada día con más recursos, con más dinero.
  • ¿Qué digo insiste? Hasta vienen sus dirigentes de España y Perú —los Vargas Llosa y otros— y participan en los acuerdos de la derecha mexicana —la de Aguilar Camín, intelectual mayor; la de Salvador Camarena, periodista menor— reunidos todos ellos en la Universidad de Guadalajara en evento previo a la Feria Internacional del Libro, la de Raúl Padilla que será más de lo mismo?

No, no fueron los convocados al evento sobre libertad de expresión en la UDG quienes insultaron a Beatriz Gutiérrez Müller en Twitter. Tan tontos no son.

Pero las ofensas miserables han avanzado, imparables, en las redes sociales por la forma en que manipulan la indignación de los usuarios de Twitter y Facebook tales paladines de la libertad —entendida no tanto como economía de mercado competitiva, que eso no les interesa, sino como abuso de los recursos públicos en sus relaciones con el Estado, algo que perdieron con la llegada de AMLO al poder—.

Creo que se equivocó Andrés Manuel al leer en la mañanera de este viernes un tuit excesivamente ofensivo contra su esposa. Pero, sin duda, lo entiendo: como compañero de la historiadora, perdió el control. Cualquiera lo pierde cuando se insulta con tantas vulgaridades a una persona tan cercana y querida.

Ya son años de insultos a la familia del presidente de México; a sus hijos mayores, con calumnias baratas, pero sobre todo a su hijo menor de edad y a su esposa, Beatriz Gutiérrez, con las ofensas más vulgares imaginables..

¿Por qué tanto odio sembrado contra Beatriz? Sin duda, se le envidia por su talento, por su compromiso con México, por haber sido fundamental en el éxito de su marido en la política.

La envidia enferma, enloquece. Las redes sociales han enloquecido en gran medida desorientadas por intelectuales, periodistas, políticos y empresarios que han perdido privilegios.

Abusan de la paciencia y la buena fe de Andrés Manuel. Abusan del humanismo de Beatriz.

Pero lo que hacen todos lo vemos y no es aceptable porque no es democrático. Habrá que parar a esa derecha golpista. Ya, en su momento, la buena gente conservadora, que abunda en México, tendrá la oportunidad de expresarse contra AMLO y la 4T, si así lo decide, en la consulta de revocación o ratificación de mandato y en las presidenciales de 2024.

Pero a los golpistas hay que exhibirlos y detenerlos. Ya bastante daño han hecho insultando a dos personas honestas, Andrés Manuel y Beatriz, que llegaron a Palacio Nacional después de muchos años de dura lucha pacífica y, desde luego, gracias a los votos de millones de mexicanos.