Las imágenes están ahí, a la vista, para quienes hagan una simple búsqueda en Twitter: las reuniones celebradas cómo parte del Foro Económico Mundial celebrado cada año en Davos, Suiza, tienen medidas de higiene para prevenir que sus participantes -muchos ya bastante veteranos cómo su fundador, el recalcitrante neoliberal Klaus Schwab- se infecten de Covid.

Vaya cinismo de los que van a Davos, pero no quieren ir a “Dallas” a enfermarse del patógeno, creado posiblemente, de acuerdo al Doctor Jeffrey Sachs con “biotecnología estadounidense”, mismo que ataca de forma sistémica el sistema sanguíneo, el corazón, el cerebro y hasta los testículos de quienes se enferman.

Una gravedad, la del Covid-19, que se contrapone contra el mandato de la “mano invisible” del “mercado” del fallido sistema neoliberal que ya ordenó a los trabajadores el actuar como si todo estuviera normal y cómo si el enfermarse varias veces al año de este peligroso virus fuera “business as usual”, es decir, “Party like it’s 2019″, con el perdón del legendario cantautor Prince Rogers Nelson.

Esa es la realidad distópica a la que tendremos que acostumbrarnos, de ahora en adelante, la “gente pequeña” tendrá que arriesgar su vida para ganarse el pan de cada día, mientras que las cada vez más irrelevantes élites occidentales contaminan aún más el medio ambiente con sus vehículos y jets privados mientras que sermonean sobre el calentamiento global a los países del sur global.