“A los 79 años, Biden está probando los límites de la edad y de la presidencia”, es el título del texto que tira al casi octogenario presidente literalmente “abajo del autobús”. El texto señala que:

  • Biden se ve más viejo que apenas hace unos cuantos años.
  • Manejar la agenda del presidente más viejo en la historia de los Estados Unidos presenta “retos distintivos”.
  • Las encuestas señalan que muchos estadounidenses consideran a Biden “demasiado viejo”.
  • “Estrategas” del Partido Demócrata consideran que no debería volver a contender por la presidencia.
  • Su nivel de energía, aunque “impresionante” para alguien de su edad “ya no es lo que era”.
  • Existe el temor de que Biden pueda volver a tropezar cuando camina. Ya ha caído de forma pública al menos dos veces: una al subir las escaleras del avión presidencial y otra, al montar una bicicleta.
  • Admiten lo que muchos hemos señalado: Biden pierde “el tren del pensamiento”, tiene problemas al recordar nombres y parece “confuso por momentos”.

No es nada más el NYT quienes se han unido a esta súbita muestra de veracidad respecto a la salud mental de Biden. CNN señaló que Biden “quizás no es capaz” de actuar con la urgencia que ameritan las demandas del momento.

Por su parte, el Washington Post, propiedad del oligarca Jeff Bezos quién se ha hecho de palabras con Biden en redes sociales por el tema de la inflación fuera de control en Estados Unidos, señaló que el gobierno de Biden muestra una capacidad de reacción “de pasos lentos”.

No es casualidad que los medios que tanto hicieron por proteger a Biden en la contienda electoral del 2020 ahora estén dispuestos a echarlo “debajo del autobús”. Aguas.