En el marco de la consulta de revocación de mandato del próximo 10 de abril, el presidente AMLO y su gobierno han violado flagrantemente la ley electoral. A pesar de los exhortos del INE y de sus consejeros, el presidente mexicano se empecina en hacer propaganda en torno a sus supuestos logros. Al momento de la redacción de estas líneas, el INE ha dictado 13 medidas cautelares contra Morena y el gobierno federal por el “despliegue” de los éxitos del presidente durante el espacio mañanero y los anuncios publicitarios repartidos a lo ancho del país.

El pasado lunes AMLO se lanzó, como acostumbra, contra el INE, asegurando que la autoridad electoral busca que no se conozca la consulta, y con ello, que exista poca participación ciudadana. En palabras del propio AMLO, el INE atenta contra la democracia en concierto con la derecha golpista y reaccionaria.

¿No entenderá el presidente AMLO que el INE es la autoridad electoral de este país y que sus disposiciones deben ser atendidas por todos los actores públicos en la materia? Ni el propio presidente de la República está por encima del instituto, pues éste, a la luz de la Constitución, está facultado para emitir sanciones y dictar disposiciones. El INE, por su parte, debe acatar las decisiones del Tribunal Electoral ¡por encima de cualquier acción o voluntad del Ejecutivo!

¿Comprende el presidente AMLO  que lo que ha pedido el INE no ha sido dejar de comunicar el ejercicio de la consulta? Se trata simplemente de ... ¡respetar la veda electoral y detener inmediatamente la propaganda del gobierno y de Morena dirigida a motivar a los electores para que se manifiesten en favor de la permanencia de AMLO en el cargo! No se trata pues, de un capricho del INE, ni mucho menos, de un complot golpista orquestado por la derecha conservadora, sino del cumplimiento de la ley electoral.

El desdén del presidente AMLO hacia la ley es pasmoso. No únicamente se ha empecinado en la organización de una consulta amañada cuyos resultados son bien conocidos, y en el despilfarro de valiosos recursos públicos que bien hubiese servido para atender los verdaderos problemas del país, sino que en el camino viola la letra y espíritu de la ley, A su vez, acusa al INE de ser ellos quienes atentan contra la democracia bajo argumentos anti elitistas propios del presidente que no busca más que alimentar su popularidad y azuzar a sus bases electorales.

En suma, el autoritarismo del presidente AMLO parece sacado de la literatura sobre populismo latinoamericano, cuando los mandatarios, una vez que han llegado al poder mediante un legitimo proceso democrático, deciden violar el espíritu de la propia ley que les condujo al poder.

José Miguel Calderón en Twitter: @JosMiguelCalde4