Ciudad de México.- El Observatorio de Libertad Política y Económica ELEGIR, presentó un estudio sobre los impuestos que se pagan en nuestro país, los cuales, pueden llegar a alcanzar hasta el 50 por ciento de los ingresos familiares.

Elegir señala que la recaudación es el instrumento más importante de política económica que posee un Estado. Los impuestos son la obligación que tenemos los ciudadanos de contribuir con el gasto público, así como para orientar directamente la producción y distribución de bienes.

Sin embargo, un Estado con muchos y altos impuestos es más propenso a otorgarle al gobierno la posibilidad de generar más gravámenes, lo cual puede llegar a erosionar la libertad política de las personas.

Hay factores que incentivan la corrupción, uno de ellos tiene que ver con la enorme red de funcionarios derivada no sólo de la discreción del Ejecutivo, sino de las facultades otorgadas por la Ley Federal de Derechos.

En este trabajo, ELEGIR analiza los impuestos que los mexicanos pagamos todos los días; ya que como contribuyentes debemos tener claridad de los impuestos que pagamos.

En México hay pocos impuestos patrimoniales lo que es afortunado en términos de libertad económica. Estos son los que diluyen la riqueza más fácilmente, pues merman específicamente lo ya hecho y trabajado, que es la base del ahorro y del crecimiento continuo.

Estos impuestos gravan bienes que ya han satisfecho una carga impositiva al ser adquiridos, como la tenencia, el predial y el gravamen a las transacciones financieras y de capital.

Tenemos otros impuestos como el Impuesto Sobre la Renta, que es más agresivo contra la libertad económica, porque representa extracción a los ingresos de las empresas y de los particulares. El ISR transfiere la pérdida a empelados, descapitaliza y redirige el ingreso a las arcas del Estado, que bien podría ser llevado a salarios, inversión o a investigación.

El Impuesto al Valor Agregado, en cambio, es relativamente menos agresivo, pues grava el consumo. En dicho caso se tiene mayor capacidad de maniobra en el uso de los recursos disponibles.

El Impuesto Sobre Nómina es un impuesto perverso, ya que castiga la productividad, los estímulos directos al trabajo y distorsiona el mercado de trabajo.

Además, el estudio resalta que la complejidad del sistema tributario obliga a la mayoría de los contribuyentes a hacer uso de un contador, generando un gasto extra que afecta sobre todo a las pequeñas empresas, las cuales representan el mayor porcentaje de las empresas del país.

Una parte importante de los empleadores prefiere mantenerse fuera del sistema tributario, debido que la cantidad de impuestos implica grandes costos para su empresa. ¿Cómo entonces hará el Estado para detonar el crecimiento si no hay los incentivos necesarios para que eso suceda?

A continuación, una lista de los principales impuestos y contribuciones que pagamos los mexicanos, la cual refleja la gran cantidad de recursos que estamos obligados a pagar, a través de las más variadas actividades de nuestra vida cotidiana.

Además del IVA y del ISR, la legislación fiscal establece un gran número de contribuciones (impuestos, derechos, etc.) locales, federales, municipales, impuestos especiales que hacen de México uno de los países más complejos en la materia.

Los impuestos especiales, son impulsados bajo el argumento de fines extra fiscales, como desincentivar el consumo de algunos productos, así como ante una preocupación medio ambiental y de energía, pero generan sobreprecios a estos productos, que en su mayoría ya pagan el Impuesto al Valor Agregado.

A esta lista hay que sumarle una gran cantidad de contribuciones locales que pagamos como aquellas sobre: i) la adquisición de bienes inmuebles, ii) la prestación de servicios de hospedaje, iii)  actividades mercantiles e industriales, iv) rifas, sorteos, loterías y concursos; v) ejercicio de profesiones, vi) funciones notariales y correduría pública.

Pero además existen otras contribuciones que los ciudadanos hacen al erario público como las de seguridad social sea por ISSSTE o IMSS, el reparto de utilidades, cuotas a sindicatos.

Los principales impuestos que pagamos los mexicanos:

Impuesto al valor agregado (IVA) – gravamen al consumo, la mayoría de los productos, bienes y servicios que adquirimos pagan este impuesto. Tasa del 16%

Impuesto sobre la renta (ISR)

Es el impuesto directo que se aplica a los ingresos generados. Son sujetos de su pago todas las personas físicas (individuos) y morales (empresas y organizaciones).  La tasa de este gravamen cambia según el límite inferior en el que se ubica la base la cual va del 0 al 35% para las personas físicas

Impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS)

Gravamen que se aplica al pago por la producción, venta o importación de ciertos productos. Se trata de un impuesto indirecto que los contribuyentes no son quien lo pagan, sino que es trasladado a los clientes.

El IEPS también es un objeto para gravar los servicios por comisión, mediación, agencia, representación, correduría, consignación y distribución, con motivo de la enajenación de ciertos productos: Combustibles fósiles, gasolina y diesel; combustibles no fósiles, bebidas con contenido alcohólico y cerveza; tabacos labrados, cigarros; bebidas energizantes; bebidas saborizadas; plaguicidas; alimentos no básicos con alta densidad calórica.

Además, existen impuestos como los de juegos con apuestas y sorteos; servicio de redes públicas de telecomunicaciones, impuestos generales de exportación e importación; impuestos sobre nóminas; predial; impuesto sobre la tenencia; Ley Federal de Derechos, que son las contribuciones pagadas por los ciudadanos a cambio de servicios proporcionados por el Estado.

Por ello, el estudio de ELEGIR señala que un mexicano contribuyente formal  paga de su ingreso el 30 por ciento por concepto del ISR y alguien que vive en la economía informal paga 0% de impuestos.

Además, señala que del resto de nuestro ingreso, pagamos IVA, IEPS, derechos, tenencia y demás actividades que generan un impuesto: telecomunicaciones, apuestas, bebidas alcohólicas.

La evasión fiscal y la informalidad contribuyen a que los contribuyentes se encuentran excesivamente gravados y el Estado obtiene una baja recaudación total si nos comparamos con países de la OCDE, que cobran más del 50 por ciento de impuestos a sus ciudadanos.

Ante tales condiciones ELEGIR pregunta si, a pesar de todos los impuestos que pagamos los mexicanos, el gobierno no consigue recaudar lo suficiente y señala que no se pagan impuestos específicos, ¿en dónde están los impuestos que pagamos los mexicanos? ¿Tenemos los servicios que debiéramos recibir por la carga fiscal que tenemos?