Frente a la incertidumbre global, la estabilidad política y financiera es una variable de éxito que ha permitido a México superar las pruebas impuestas por  el contexto internacional.



En este proceso, el sector hacendario y la banca han cumplido para crear un ambiente de confianza en tiempos de incertidumbre.



‘No se han superado todos los retos, pero los avances son visibles en uno de los peores entornos internacionales’, reconoció el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade.



Durante su mensaje en la sesión inaugural de la 75 Convención Bancaria,  resaltó el optimismo sobre el futuro del país, pues la economía mexicana no tiene desequilibrios relevantes ni en el balance de los hogares, empresas, cuentas fiscales o externas, la inflación se comporta bien y sus expectativas están bien ancladas.



‘La disciplina y las finanzas públicas implican un déficit moderado y con un nivel con posición y trayectoria estable de deuda pública, además de que los ingresos tributarios no petroleros se encuentran en máximos históricos y deben continuar fortaleciéndose’, dijo Meade Kuribreña.



En este  sexenio, que coincidió con una etapa de desequilibrios mundiales, el sistema financiero mexicano ha experimentado una evolución favorable que se refleja en una mayor captación de ahorro, un incremento en recursos financieros que se canaliza a hogares y empresas del país, así como en una mayor transparencia de las operaciones y protección de los usuarios de los servicios financieros.



Lo más importante es que en esta nueva etapa de crisis internacional, el sector hacendario y la banca han contribuido a generar un ambiente de tranquilidad y han sentado las bases para un futuro menor. Con información de El Financiero